Seis de los agricultores fueron detenidos en enfrentamientos con agentes en Granada.
Las imágenes más impactantes fueron las de las columnas de más de 1.250 tractores -2.000, según los manifestantes- que invadieron las dos principales arterias de Barcelona para dirigirse al palacio de la Generalitat y exigir una reunión con el presidente Pere Aragonés, a quien trasladarían sus reivindicaciones.
Otro punto neurálgico de la protesta es la provincia de Málaga, en Andalucía, donde el acceso al puerto, cerrado intermitentemente, fue bloqueado de nuevo por tractores.
Se identificó a más de 400 personas a las que, según el subprefecto Javier Salas, "a partir de ahora" se impondrán sanciones.
En la vecina provincia de Cádiz, los cortes de carretera y las columnas de tractores bloquearon la autopista A4 en ambos sentidos, interrumpiendo también por momentos las conexiones con el aeropuerto.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, repitió hoy en el Senado que la intención del Gobierno es la "mano tendida" a los agricultores y ganaderos que expresan con sus protestas el malestar del sector y cuyo derecho a manifestarse está garantizado. Pero sin que ello ponga en peligro los servicios esenciales o la movilidad de los ciudadanos.
Además dio instrucciones a las fuerzas de seguridad para que impidan protestas en las calles o núcleos urbanos que no hayan sido comunicadas con antelación, según fuentes del ministerio recogidas por El País.
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