Empoli extendió su racha positiva tras el arribo del entrenador de Davide Nicola al derrotar hoy por 3-2 de visitante a un Sassuolo cada vez más comprometido con un gol en tiempo de descuento del duelo que le dio continuidad a la vigésimo sexta fecha del campeonato italiano.
Lo celebró Simone Bastoni en el cuarto minuto adicionado por el árbitro Gianluca Aureliano, quien a continuación lo amonestó por sacarse la casaca en el festejo, y lo padecieron los cerca de 13 mil aficionados que se dieron cita en el estadio Mapei, mientras un puñado de fanáticos rivales festejaban.
El equipo de Alessio Dionisi sigue sin levantar cabeza, sumó su quinta derrota en las últimas seis fechas (sólo empató con Torino tras su última victoria, frente a Fiorentina el 6 de enero) y con 20 puntos comparte el antepenúltimo puesto con Hellas Verona, derrotada el viernes 2-0 en campo de Bologna.
Sólo la diferencia de gol impide que el "verdinegro" caiga hoy en zona de descenso, en la que podría llegar a quedar mañana si Cagliari derrotase a Napoli en Cerdeña, razón de más para dudar de la continuidad de un entrenador que no logra enderezar el rumbo.
La tarde no comenzó bien para Sassuolo, pues a los 11' Sebastiano Luperto abrió el marcador que Andrea Pinamonti se encargaría de igualar por primera vez a los 54' de penal, vía por la cual Empoli volvió a ponerse arriba a los 64' con otro remate desde los 12 pasos ejecutado por el franco-senegalés M'Baye Niang.
Gian Marco Ferrari a los 77' parecía darle al menos un punto al equipo de Dionisi y se reivindicaba por la mano que derivó en el penal convertido por Niang, pero Empoli no se conformó, fue por más y tuvo un par de situaciones como para volver a ponerse en ventaja (también Sassuolo contó con una).
El visitante debió esperar a la última jugada de un partido que se moría para meter la estocada final que llegó con el cabezazo certero de Bastoni, anticipándose a todos en el primer palo tras un tiro libre ejecutado por el rumano Razvan Marin.
Un gol fundamental en clave de permanencia para el equipo de Nicola, que de eso sabe y mucho, porque estiró así su racha positiva a seis partidos, en tres de los cuales cantó victoria pues había superado a Monza y a Salernitana (anterior club del DT y hoy colista del torneo).
Los otros tres fueron empates con sabor a gloria porque llegaron frente a Juventus, Genoa y Fiorentina y le permiten a Empoli alejarse cada vez más de la zona roja de la tabla y llegar a 25 puntos, uno más que Lecce y dos por encima de Frosinone y Udinese, todos con un partido menos.
"Cada partido es una oportunidad para crecer", decía en la previa de este partido Nicola, quien ahora se enfocará en el próximo duelo que jugará de local frente al Cagliari en otro mano a mano directo por la permanencia.
La de Sassuolo parece cada vez más comprometida, pese a tener un partido pendiente por la vigésimo primera fecha que completará el miércoles frente al Napoli, último campeón del fútbol italiano que tampoco llega en racha, que cambió por tercera vez de entrenador en esta temporada y que mañana visitará justamente al equipo de Claudio Ranieri.
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