La declaración se produce en medio de una ola de graffitis en museos y monumentos en Italia para exigir medidas más enérgicas contra el calentamiento global: en junio pasado, un tribunal del Vaticano condenó a dos activistas a nueve meses de prisión, con sentencia suspendida, por sus manos en una estatua.
"Rechazo estos extremismos, pero los jóvenes están preocupados por su futuro", dijo el Papa cuando se le preguntó si su próxima exhortación apostólica sobre el clima podría expresar apoyo a estos grupos.
"Será un repaso de lo ocurrido desde el Acuerdo de París hasta hoy", explicó el Pontífice.
El documento, una especie de actualización de la encíclica ecologista "Laudato Si'", se publicará el 4 de octubre, fiesta de San Francisco de Asís, santo que inspiró el nombre del Papa.
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