El Papa Francisco salió este viernes del Hospital Policlínico Universitario Agostino Gemelli, en Roma, donde estaba hospitalizado desde el 7 de junio para una cirugía abdominal.
El Pontífice salió por la entrada principal de la unidad en su silla de ruedas, saludando a los pacientes y periodistas que lo esperaban. "¡Estoy vivo! Gracias por sus servicios, muchas gracias", dijo mientras cruzaba dos alas del hospital.
El Vaticano informó que el Ángelus del domingo y las audiencias previstas para los próximos días se desarrollarán con normalidad. En cambio, la audiencia general del miércoles no será celebrada por Francisco "para salvaguardar la recuperación postoperatoria del Santo Padre".
El alta del Papa del hospital romano se esperaba desde primeras horas de la mañana, tanto que una multitud de fieles lo esperaba a la entrada del Gemelli.
"El Papa está bien, lo vieron. Tiene que recuperarse, como todos. Por eso, seguirá con su recuperación en Santa Marta, pero ya retomó el trabajo", dijo Sergio Alfieri, el cirujano que operó a Francisco.
"En cuanto a los próximos viajes y compromisos, ha confirmado todos los viajes. Los podrá afrontar mejor que antes, porque ya no tiene las molestias que tenía. Será un Papa más fuerte", añadió el médico. El Pontífice se sometió a una laparotomía, cirugía para corregir un laparocele, una especie de hernia que se había formado en la cicatriz de una operación de colon realizada en 2021.
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