A través de un comunicado, el Ceb reconoció que, si bien se ha avanzado en la creación de nuevos protocolos y códigos de conducta, las medidas adoptadas han sido insuficientes, y no han dado "la respuesta esperada" por los fieles y de la sociedad en general".
"Por eso -se dice- hemos decidido crear una comisión nacional de escucha y una comisión nacional de investigación para determinar responsabilidades y esclarecer cabalmente lo ocurrido".
Al mismo tiempo, concluye el comunicado, "trabajaremos arduamente para prevenir y así dar a las familias la certeza de que los niños y jóvenes estarán seguros en los ambientes eclesiales".
El anuncio de la CEB se produjo tras la llegada a Bolivia de monseñor Jordi Bertomeu, máximo responsable del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, enviado personalmente a La Paz por el Papa Francisco.
El escándalo de los abusos eclesiásticos salió con fuerza hace unas semanas tras la publicación por parte del diario español El País de las memorias registradas en su diario por el padre Alfonso 'Pica' Pedrajas, fallecido en 2009, quien admitió haber abusado cuando estuvo en Bolivia de 85 menores.
Por su parte, la fiscalía boliviana ha abierto una investigación, recibiendo denuncias y elaborando una lista de numerosos religiosos acusados ;;de abusos.
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