(ANSA) - El Papa Francisco, en un llamamiento al final de la audiencia general con motivo del Día Mundial del Agua, subrayó hoy que el "agua no puede ser derrochada ni abusada", ni debe ser "motivo de guerras", sino que "debe ser preservada para nuestro beneficio y el de las generaciones futuras".
"Hoy celebramos el Día Mundial del Agua", dijo el Pontífice.
"Me vienen a la mente las palabras de San Francisco de Asís: 'loado sí', mi Señor, por la hermana agua, que es muy útil y humilde, y preciosa y casta".
"La segunda Conferencia del Agua de la Organización de las Naciones Unidas se lleva a cabo estos días en Nueva York", añadió. "Rezo por el éxito de los trabajos y espero que este importante evento acelere las iniciativas a favor de quienes padecen escasez de agua, de este bien primordial".
"En estas sencillas palabras sentimos la belleza de la creación y la conciencia de los desafíos que implica el cuidado", agregó.
El Papa Francisco, a bordo del "papamóvil" abierto, ingresó este miércoles en la Plaza de San Pedro, donde celebró su audiencia general.
El Pontífice, aplaudido por la multitud de peregrinos de todo el mundo, recorrió los distintos sectores de la plaza para saludar y bendecir de cerca a los fieles.
Antes de entrar en la plaza, Francesco hizo subir a cinco niños al vehículo, algunos con gorras amarillas.
Antes de la audiencia general, el Papa bendijo la campana "La voz de los no nacidos" donada por la Fundación "Sí a la vida" de Zambia.
Esta campana será llevada a la Catedral del Niño Jesús en Lusaka y desde allí partirá hacia otras ciudades del país africano.
El arzobispo de Lusaka, Alick Banda, y el vicepresidente de la Fundación, Bogdan Romaniuk, participaron en la bendición de la campana, que tuvo lugar en el Vaticano en el "Fungo", en la entrada trasera del Aula Pablo VI.
"Este sábado celebraremos la solemnidad de la Anunciación del Señor. En vuestra patria es también el Día de la Santidad de la Vida", dijo el Pontífice. "Como signo de la necesidad de proteger la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural, el 'Sí a la Vida', la Fundación destina a Zambia la campana 'La Voz de los No Nacidos' que bendije esta mañana".
"Su sonido lleva el mensaje de que toda vida es sagrada, toda vida es inviolable", añadió el Papa Francisco en la audiencia general, saludando a los peregrinos polacos.
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