(ANSA) - El Papa Francisco admitió que el cansancio que le impide ver las cosas con claridad podría llevarlo a renunciar como jefe de la Iglesia Católica.
La declaración fue dada en una entrevista con la cadena pública suiza RSI con motivo del 10º aniversario de su pontificado, que se celebrará el 13 de marzo.
Durante la conversación, se le preguntó a Jorge Bergoglio qué razones podrían llevarlo a renunciar al papado en el futuro. “Un cansancio que no te deja ver las cosas con claridad. Falta de claridad, de saber valorar las situaciones. También puede ser por un problema físico”, responde Francisco.
En la secuencia, el Papa también admitió que pide opiniones a personas cercanas a él. “Siempre pregunto al respecto y sigo sus consejos. '¿Cómo van las cosas? ¿Crees que debería...?' [Le pregunto] a la gente que me conoce, también a algunos cardenales inteligentes. , está bien'. Pero por favor házmelo saber a tiempo", dijo. Francisco también dijo que hoy tiene "menos resistencia física" y que su problema en la rodilla era una "humillación física".
"Estaba un poco avergonzado", dijo Bergoglio sobre el uso de una silla de ruedas para moverse. A finales del año pasado, Francisco reveló la existencia de una carta de renuncia lista desde hace casi una década en caso de impedimento por motivos médicos. Sin embargo, en febrero aseguró que no pensaba dejar el cargo y que el ministerio del Papa es "para toda la vida".
El Pontífice también reafirmó su posición acerca de los homosexuales en la Iglesia, al recordar un pasaje del Evangelio de San Marcos en el que Jesús pide que "todos" asistan a un banquete.
La gran respuesta la dio Jesús: todos. Todos. Adentro todos.
Cuando los exquisitos no quisieron ir al banquete: vayan ahí al cruce de caminos y llamen a todos. Buenos, malos, viejos, jóvenes, chicos: todos. Todos. La iglesia es para todos", dijo el papa en una entrevista con el portal argentino Infobae.
"Y cada uno resuelve sus posturas ante el Señor con la fuerza que tenga. Esta es una iglesia de pecadores. La iglesia de santos no sé dónde está, acá somos todos pecadores. ¿Y quién soy yo para juzgar a una persona si tiene buena voluntad?", agregó.
SI una persona "es más bien de la pandilla del diablo, bueno, a defender un poquito. Pero hoy día se pone mucho la lupa sobre este problema. Creo que hay que ir a lo esencial del evangelio: Jesús llama a todos y cada uno resuelve su relación con Dios como puede o como quiere. A veces [uno] quiere y no puede, pero el Señor espera siempre", afirmó Francisco.
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