El Papa invita a las autoridades de la República Democrática del Congo a ponerse al servicio de la gente, sin dejarse "comprar", y evitar la "corrupción y la injusticia".
"El poder tiene sentido solo si es servicio. Cuán importante obrar con este espíritu, huyendo del autoritarismo, la búsqueda de ganancias fáciles y la avidez del dinero", enfatizó el Papa, y requirió "favorecer elecciones libres, transparentes y creíbles: extender todavía más la participación en los procesos de paz a las mujeres, a los jóvenes y los grupos marginados, buscar el bien común y la seguridad de la gente más que los intereses personales o de grupo: reforzar la presencia del Estado en cada parte del territorio, ocuparse de las tantas personas refugiadas y desplazadas".
"No se dejen manipular ni mucho menos comprar por quien quiere mantener el país en la violencia, para explotarlo y hacer negocios vergonzosos: ello lleva solo descrédito y vergüenza -prosiguió el pontífice-, junto a muerte y miseria. Hace bien acercarse a la gente para darse cuenta cómo vive. Las personas confían cuando sienten que quien las gobierna está realmente cerca, no por cálculo ni por exhibición, sino por servicio".
El Papa evitó dejar de lado el "tribalismo". "Tomar partido obstinadamente por su propia étnica o por intereses particulares, alimentando espirales de odio y de violencia, es una desventaja para todos", concluyó en Santo Padre.
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