"A pesar de las muchas y generosas obras de solidaridad realizadas a nivel civil y eclesial, las causas del subdesarrollo no han sido eliminadas", afirmó hoy el Papa en la audiencia con los voluntarios de la Sociedad para la Promoción de la Alfabetización en el Mundo.
"Pues bien, vuestro trabajo apunta precisamente a remover una de las causas del subdesarrollo, que es precisamente el analfabetismo", añadió el pontífice.
Y subrayó que "el sueño de la Iglesia, o más bien, el sueño de Dios" es "un mundo en el que todos puedan vivir como hermanos y hermanas con plena dignidad".
En otra actividad del día, Francisco se refirió a la lepra, una enfermedad antigua pero aún no extinta. El Papa lo recuerda subrayando que "el estigma asociado a la lepra sigue provocando graves violaciones de los derechos humanos en varias partes del mundo".
En el mensaje a los participantes del Simposio sobre la enfermedad de Hansen que se desarrolla en el Vaticano, el Papa, retomando las palabras de su encíclica Fratelli Tutti, afirmó: "Hemos crecido en muchos aspectos pero somos analfabetos en acompañar, tratar y apoyar los más frágiles y débiles de nuestras sociedades desarrolladas. Nos hemos acostumbrado a mirar hacia otro lado, a pasar, a ignorar las situaciones hasta que nos tocan directamente".
"No debemos ignorar esta enfermedad, que por desgracia todavía afecta a tantos, especialmente en contextos sociales más desfavorecidos -continúó. Por eso, debemos aprovechar la Jornada Mundial contra la Lepra para revisar nuestros modelos de desarrollo y denunciar y tratar de corregir la discriminación que provocan".
"Esta es una buena oportunidad para renovar nuestro compromiso de construir una sociedad inclusiva, que no deje a nadie al margen", concluyó el Papa.
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