La tasa de depósito, considerada de referencia, se redujo en 0,25 puntos porcentuales hasta el 2,75%, tal como esperaban la mayoría de los economistas.
Se trata de la quinta reducción del
costo del dinero desde junio y la cuarta consecutiva.
Los picos de tasas de interés alcanzados en 2023, que fueron
decididos en su momento para frenar la alta inflación provocada
por el aumento de los precios de la energía y la recuperación
post-COVID, son ahora cosa del pasado.
"El proceso de desinflación avanza por buen camino" en la
zona euro, indicó un comunicado del BCE, lo que significa que la
entidad sigue previendo que la inflación regrese a su objetivo
del 2% durante el transcurso de este año.
De esta manera, el repunte de los precios en la zona euro en
el último trimestre de 2024, que llegó al 2,4% en diciembre, es
considerado una variación menor. La preocupación de los
responsables del euro ahora se ha trasladado al apoyo de una
zona económicamente frágil.
Los datos de hoy muestran que el crecimiento económico se
estancó a finales del año pasado, según Eurostat. Esto se debe a
un desempeño débil de Alemania y Francia, las dos principales
economías del bloque, afectadas por la inestabilidad política y
desafíos estructurales.
"Factores adversos siguen pesando sobre la economía, pero el
aumento de los ingresos reales y la atenuación progresiva de los
efectos de la política monetaria restrictiva deberían impulsar
una recuperación gradual de la demanda", señaló el BCE en su
comunicado.
Por su parte, la Reserva Federal de EE.UU. (Fed) decidió el
miércoles mantener sin cambios sus tasas de interés, dentro de
un rango de entre 4,25% y 4,50%, debido a la persistencia de una
inflación elevada y un mercado laboral considerado sólido.
La Fed ignoró las presiones del presidente estadounidense
Donald Trump, quien la semana pasada había "exigido" una
reducción inmediata de las tasas de interés.
"En este momento es prematuro decir dónde tendrá que parar
la caída de las tasas de interés", una decisión que "se basará
en los datos económicos", así como en el ritmo, la extensión y
la secuencia de las próximas decisiones de política monetaria,
advirtió la presidenta del BCE, Christine Lagarde.
Lagarde explicó que la decisión de hoy "fue tomada por
unanimidad" y advirtió por el riesgo de una guerra comercial
ante las nuevas políticas de Washington con Donald Trump y su
amenaza de aumentar los aranceles a las importaciones.
"Los riesgos para el crecimiento económico siguen inclinados
a la baja, pero una mayor fricción en el comercio mundial podría
pesar sobre el crecimiento de la zona del euro y debilitar la
economía global", dijo Lagarde.
En el Foro Económico Mundial de Davos, el presidente
estadounidense instó a las empresas a trasladar su producción a
EE.UU., bajo la amenaza de imponer elevados aranceles aduaneros.
Estas amenazas de una guerra comercial podrían afectar las
exportaciones europeas, debilitando aún más el crecimiento y
proporcionando argumentos adicionales para que el BCE continúe
bajando las tasas.
Sin embargo, el aumento de los aranceles estadounidenses
también generaría inflación en EE.UU., lo que podría tener un
efecto de contagio a nivel global. Estas turbulencias podrían
fracturar la unidad del Consejo de Gobernadores del BCE, que ya
está dividido sobre la magnitud de las reducciones de tasas y el
impacto de los aranceles estadounidenses en la estabilidad de
precios en Europa, según la economista Stephanie Schoenwald, del
banco público alemán KfW.
Otro factor clave que se sigue de cerca es el precio del
barril de petróleo, que ha aumentado desde diciembre. Los
analistas dudan que Arabia Saudita y la OPEP cedan a las
presiones de Trump, quien les ha instado a reducir los precios
del petróleo aumentando la producción.
En ausencia de un choque económico en los próximos meses, el
gobernador del Banco de Francia, François Villeroy de Galhau,
considera "plausible" que el tipo de depósito se reduzca
"alrededor del 2% para el verano", según declaró en Davos.
Esto correspondería a la tasa denominada "neutral", que ni
favorece ni perjudica el crecimiento económico y contribuye a
mantener la inflación en torno al 2%, una posibilidad que
Lagarde negó hoy.
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Copyright ANSA