Mientras que el mercado de telefonía celular descendió a nivel global en 2022 un 9,7% respecto al año anterior, en Italia cerró el ejercicio con un aumento del 4% en conjunto en el sector llamado "telecom".
Así resulta de los datos de la empresa de análisis Gfk.
Entre los motivos de la desaceleración general se encuentran la reducción del presupuesto de gastos de los consumidores y la extensión del ciclo de la vida de los productos.
Los datos muestran que de enero a septiembre de 2018 solo el 48% de los consumidores utilizaba su celular inteligente durante dos años.
Este porcentaje aumentó al 57% en el mismo periodo de 2022, sobre todo entre la Generación Z (15-25 años).
Las generaciones más jóvenes están más atentas a la sostenibilidad y por tanto alargan conscientemente el ciclo de la vida de sus dispositivos.
"Ya habíamos previsto para 2022 un efecto saturación después de las grandes ventas en los años de la pandemia, pero el alargamiento de la debilidad del mercado chino tuvo un impacto significativo en los resultados", explicó Jan Lorbach, experto de Gik en el sector telecom.
También el segmento de los celulares inteligentes, incluidos los phablet (los terminales con pantalla de 6 pulgares para arriba) registró una caída de la demanda del 9,1% respecto al año anterior, en el periodo de enero a diciembre de 2022, por un total de 908 millones de unidades vendidas.
Los ingresos estuvieron todavía más afectados, con un descenso del 10,2% por un valor de 330.000 millones de dólares.
Respecto al mercado italiano, además del aumento del 4% en el apartado telefonía en general (que incluye también los dispositivos de uso laboral), aumentan los respectivos datos de celulares inteligentes (2,7%) y wearable (8%).
Gik prevé un 2023 más robusto en el sector de la telefonía, en buena parte gracias a China, el mayor mercado, que debería remolcar el crecimiento a nivel internacional.
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