Giorgia Meloni despega de Roma tratando de archivar el caso de escuchas telefónicas, una "tormenta en un charco", como lo señala uno de sus leales, y aterriza en Argel en busca de acuerdos estratégicos principalmente en energía, pero también en industria y espacio.
Vuela al país norafricano a través del Mediterráneo, donde "navegan la gran mayoría de nuestros intereses nacionales", y por veinticuatro horas intenta concentrarte en la energía, el gas, oportunidades para el desarrollo industrial, los temas de su agenda, en una primera visita bilateral oficial al exterior.
Una misión que comenzó luego de la nota divulgada para reiterar "plena confianza" en Carlo Nordio, el ministro de Justicia muy criticado en las últimas horas después de proponer limitar el uso de las escuchas en las investigaciones.
En Argel, la premier tratará de colocar uno de los primeros ladrillos del Plan Mattei, su idea de cooperación con los países africanos para hacer de Italia "un hub energético" en el Mediterráneo, como lo remarcó hoy desde El Cairo, el canciller Antonio Tajani, en visita oficial a Egipto.
Argelia es un punto neurálgico, es que, tras la guerra en Ucrania, se ha convertido en el primer proveedor de gas natural de Italia. Si Roma ha encontrado una manera de reemplazar la provisión de Rusia, Argel fue el camino que buscaba para reducir la dependencia de la venta de petróleo, aunque sufre la crisis recurrente cada vez que baja el precio del crudo.
Es difícil decir quién gana más en la cooperación entre los dos estados, incluso si se alinean en dos frentes diferentes relación al conflicto ucraniano. Argelia, socio histórico de Moscú y su tercer mayor comprador de armas, se abstuvo en la ONU en abril en la moción contra Rusia y votó 'no' a la de suspenderla en el Consejo de Derechos Humanos.
"Argelia es amiga de todos los países, excepto de los que no lo quieren: no depende de ninguna órbita diplomática", ha manifestado en días pasados ;;-según lo expresado por la periódico L'Expression - el presidente de la República argelina, Abdelmadjid Tebboune, que recibirá mañana a Meloni.
Italia y Argelia firmarán mañana un memorando de entendimiento para la cooperación espacial, y se abocarán a programas también de automoción, construcción naval, turismo, agricultura y construcción naval naval. Así lo demuestran los acuerdos privados previstos al final la visita de la delegación italiana, de la que forman parte también el CEO delENI Claudio Descalzi y el presidente de Confindustria Carlo Bonomi.
Desde la perspectiva del Palazzo Chigi, lo que se pactará también tienen efectos positivos en la gestión de los flujos de inmigrantes de africa. A corto plazo, sin embargo, Meloni pide la UE un cambio de enfoque, y lo reiterará en el Consejo de la Unión Europea del 9 al 10 de febrero, después de haber ilustrado la posición de los italiano a los socios en las próximas semanas.
Además, la premier italiana, el 3 de febrero, debe viajar a Estocolmo, Suecia, país que tiene la presidencia rotatoria de la UE, y planea una visita a Berlín también.
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