La defensa del Pueblo, Iris Marín,
cuestionó este viernes que el gobierno de Gustavo Petro haya
designado a varios ex jefes de los grupos paramilitares como
gestores de paz, al recordar que muchos no han contribuido ni
con el reconocimiento de la verdad de sus crímenes, ni con
hechos de pacificación.
"¿Por qué esta vez sí podemos confiar en que van a
contribuir a la paz, si en el pasado no lo han hecho; por qué
llamarlos hoy gestores de paz, si han sido gestores de guerra y
hoy están privados de la libertad, después de haber reincidido y
haber sido reconocidos como criminales de guerra; qué mensaje le
mandamos hoy a quienes cometieron delitos de gravedad
comparables a los que ellos cometieron en el pasado?", se
preguntó Marín.
La Defensora del Pueblo advirtió que al menos cuatro de los
18 ex jefes paramilitares designados por el Ejecutivo fueron
expulsados de la jurisdicción que se creó en la dejación de
armas durante el gobierno de Alvaro Uribe (2002-2010) por no
contribuir con la verdad, ni admitir sus graves crímenes.
En ese sentido, la funcionaria aseguró que los ex
ultraderechistas le deben mucho al país, de manera que lo que el
gobierno les encomiende para alcanzar la paz puede servir, pero
debe hacerse con un plan estructurado y puntual, con compromisos
con la justicia y las víctimas, y no deben ser vistos como
personas que están "ayudando" sino "responsables" de
atrocidades.
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