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"¡Bravo!" fue la expresión usada
este jueves por la defensora del Pueblo, Iris Marín, en su
cuenta de X, para felicitar a las congresistas colombianas que
logran la noche del miércoles que fuera aprobada una ley que
prohíbe el matrimonio de menores de edad.
La norma, a la que le falta la conciliación con la Cámara de
Representantes y la sanción presidencial para que se convierta
en ley de la República, llevaba el nombre "Son niñas no
esposas", fue promovida por varias de las congresistas del país
y elimina el matrimonio infantil, además de prohibir las uniones
maritales o tempranas en el que uno de los contrayentes es menor
de edad.
"Por lo regular son niñas pobres, obligadas, sacándolas de
las escuelas, sometidas a violencias en el hogar, cuando aquí
estamos haciendo algo civilizatorio, porque las menores no son
objetos sexuales si no niñas; de modo que las prohibiciones son
de carácter general, incluyendo los sectores religiosos, de modo
que la ley ayuda, aunque no cambia las costumbres", afirmó la
senadora izquierdista Clara López, ponente de la ley.
Mientras que la senadora indígena Marta Peralta Epiayú pidió
no estigmatizar a las comunidades aborígenes, que es donde
suelen darse más este tipo de uniones, al reclamar una labor
pedagógica que ayude a que muchos de esos pueblos originarios
entiendan que la menarquia no convierte a una niña en mujer.