Estos ingresos, reportados hasta el sábado pasado, suponen un descenso de 148.679 migrantes respecto al mismo periodo del año pasado.
La mayoría de las personas que cruzaron la selva son ciudadanos de Venezuela, Colombia, Ecuador y Haití.
Dentro del acuerdo de entendimiento firmado entre Panamá y Estados Unidos en julio pasado, continuaron los vuelos de deportación y expulsión de personas que ingresaron al país centroamericano de forma irregular.
Desde el pasado 20 de agosto hasta hoy fueron retornados un total de 647 migrantes a sus países de origen.
El último vuelo partió el sábado pasado con 43 ciudadanos colombianos a bordo, con destino a Medellín (Colombia).
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