El accidente se produjo en la zona de Sanjdi, situada a 40 kilómetros al sur de Quetta, capital de la provincia de Baluchistán.
"Los 11 mineros murieron por asfixia causada por las emisiones de monóxido de carbono y sus cuerpos han sido recuperados", dijo Abdul Gahani, inspector jefe de minas de la provincia.
La tragedia de hoy se produce tras otro accidente ocurrido el 20 de marzo, cuando 18 mineros perdieron la vida tras una explosión de gas metano a cientos de metros de distancia, dentro de una mina de carbón también en Baluchistán.
Miles de mineros trabajan en minas de carbón de la misma provincia, donde a menudo no existen medidas de seguridad adecuadas.
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