Así lo anunció Istat, que precisó que el aumento del costo de la vida se produjo "aunque en un contexto de estabilidad general de los precios a nivel económico".
Pero el carrito de compras, la canasta con los productos básicos, no se detiene: los precios de los alimentos, los bienes del hogar y de cuidado personal se aceleran tendencialmente y pasan 2 al 2,6%, con lo que la inflación adquirida para 2024 se sitúa en el 1%.
Istat explica que la dinámica inflacionaria se concentra en determinados sectores: se agravan las tensiones sobre los precios de los bienes alimentarios, con una clara aceleración de su crecimiento interanual, y de los bienes energéticos, que ya no presionan hacia abajo.
Los precios de los servicios de transporte también se están acelerando.
En particular, el aumento de la tasa de inflación se ve afectado principalmente por la aceleración de los precios de los bienes energéticos regulados (del 3,9% al 7,5%) y la moderación de la caída de los de los bienes energéticos no regulados (del -10,2%).
% hasta el -6,6%).
Una de las causas del aumento del costo de vida es la
evolución de los precios de los bienes alimentarios, tanto
procesados ;;como no procesados, de los bienes duraderos,
servicios de transporte, bienes no duraderos, y, en menor
medida, los de servicios relacionados a la vivienda a las
comunicaciones.
En noviembre, la "inflación subyacente", neta de energía y
alimentos frescos, se acelera (del 1,8% al 1,9%), al igual que
la inflación neta de bienes energéticos (del 1,9% al 2,2%).
Las asociaciones de consumidores reaccionaron con
preocupaciones ante estos datos, y una de ellas, Codacons,
estimó que una inflacíon de 1,4% representa un aumento promedio
del gasto para una familia tipo de 460 euros al año, "que se
eleva a 627 euros para una familia con dos hijos".
Según la asociación de defensa de los usuarios, son "muy
preocupantes" los incrementos en alimentos y bebidas no
alcohólicas, de 3,2% en noviembre. "Esto significa que una
familia con dos hijos gastará 292 euros más por año solo para la
compra de alimentos y bebidas", estimó.
"Los aumentos de los precios minoristas se ven afectados por
las tensiones en los mercados internacionales de materias
primas, que repercuten directamente en los precios minoristas,
pero también por ajustes al alza ligados a la proximidad de la
Navidad, cuando las familias aumentan su consumo", explicó el
presidente de Codacons, Carlo Rienzi.
"Desafortunadamente, en materia de precios asistimos a una
total inacción por parte del gobierno, que no ha adoptado
ninguna medida encaminada a controlar las listas de precios y
combatir la especulación".
Ese es precisamente el reclamo de otra de las asociaciones
de consumidores, Assoutenti, que pide al gobierno de Giorgia
Meloni adoptar medidas "para evitar que la Navidad de los
italianos sea muy difícil.
"Las subidas que afectan al sector alimentario merecen la
máxima atención - explica el presidente, Gabriele Melluso. La
consecuencia es que las familias redujeron el consumo de
alimentos, que cayó en volumen en un total de 1.600 millones de
euros en 2024, neta de inflación".
"La situación de los precios - concluye Melluso - corre el
riesgo de empeorar durante las próximas vacaciones, y por este
motivo hacemos un llamamiento al gobierno para que salve la
Navidad de los italianos adoptando medidas destinadas a reducir
lo antes posible las listas de precios, especialmente en el
sector alimentario".
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