"Italia no sólo está preparada para este cambio, nuestro país ya ha cambiado y debemos garantizar que las normas se adapten al nuevo contexto, profundamente diferente al de hace 30 años", declaró Tajani en una entrevista publicada en el periódico brasileño Folha de São Paulo, en vísperas de su visita a Brasil.
"El concepto de ciudadanía debe basarse en la pertenencia a una comunidad, con todos los derechos y deberes. Esto implica valores comunes, incluidos los lingüísticos y culturales, que son fundamentales", subrayó Tajani.
Un proyecto de ley presentado por Forza Italia pondría un límite generacional a la obtención de la ciudadanía a través del "ius sanguinis" para los llamados oriundos, o italianos con cualquier ascendencia italiana.
En su lugar, se crearía el "ius italiae", que prevé la concesión de la ciudadanía a los extranjeros nacidos en Italia o que hayan llegado antes de cumplir cinco años al cumplir 16 años, pero con la condición de que hayan residido en el país durante un década ininterrumpida y que hayan completado el ciclo escolar obligatorio.
"Hay que tener en cuenta que para muchos descendientes no existe relación con Italia desde hace muchos años. Estos posibles cambios responden a la misma necesidad: dar el justo valor al concepto fundacional de ciudadanía, garantizando sobre todo el intercambio de valores culturales", explicó Tajani.
El ministro se refirió a la situación política en Venezuela y dijo que Italia estaba comprometida a mantener una "fuerte presión" sobre el gobierno de Nicolás Maduro, y elogió el "delicado intento de mediación" realizado por Brasil.
"El resultado electoral proclamado por las autoridades de Caracas no tiene legitimidad. Faltan datos y registros electorales completos y verificables de forma independiente.
Estamos preocupados por la continua ola de represión por parte del régimen venezolano, que involucra a varios italianos", dijo Tajani.
El ministro reiteró el pedido de "la liberación inmediata de todos los presos políticos" y de respetar la "voluntad del pueblo venezolano a través del voto democrático y el inicio de un diálogo entre las partes".
"Estamos comprometidos a mantener una fuerte presión sobre el régimen de Maduro a nivel internacional para mantener el tema bajo la atención global, a través de foros como el G7, así como a ofrecer apoyo a la valiente oposición democrática venezolana", agregó.
Según Tajani, el régimen venezolano parece "cada vez más radicalizado", por lo que es "fundamental mantener abiertos los limitados canales de diálogo".
Brasil, a menudo en colaboración con Colombia, "está llevando a cabo un delicado intento de mediación, gracias a su credibilidad regional, la solidez de sus valores democráticos y la relación directa que existe entre los representantes de los dos países", subrayó.
Tajani finalmente elogió la decisión del gobierno de Lula de tomar posesión de la embajada argentina en Caracas, "una señal de que las diferencias políticas, aunque existen, pueden superarse cuando están en juego las relaciones bilaterales y la seguridad regional".
"Como país amigo y atento observador de la dinámica regional, Italia aprecia los esfuerzos y la contribución de Buenos Aires y Brasilia en la crisis venezolana", expresó.
Asimismo, Tajani elogió la "amistad histórica" ;;con Brasil.
"Este año celebramos 150 años de inmigración italiana a Brasil. En el país viven casi 850 mil italianos. Existe una amistad histórica entre Roma y Brasilia, fundada en sólidos vínculos culturales, económicos y sociales. Es un año crucial para las relaciones bilaterales", dijo en la entrevista.
Tajani recordó que Brasil participó en la cumbre del G7 en Italia en junio pasado y afirmó que los dos países hallaron "una convergencia importante en temas como la lucha contra el cambio climático, el hambre y la pobreza, una convergencia que será profundizada durante el encuentro del G20 en Río de Janeiro" previsto para los días 18 y 19 de noviembre.
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