Fue la primera vez que Cutfield, un marinero experto neozelandés de 51 años, fue interrogado desde que se lo investiga por sospecha de homicidio por negligencia múltiple y por causar un naufragio en el que murieron Lynch, su hija Hannah, de 18 años, y otras cinco personas.
El capitán está siendo defendido por los abogados Giovanni Rizzuti y Aldo Mordiglia, quienes abandonaron la sala de conferencias del hotel Domina donde su cliente fue interrogado.
Los fiscales de Termini Imerese pusieron oficialmente a Cutfield bajo investigación el lunes.
Cutfield fue interrogado el domingo por
los magistrados durante dos horas.
En total, 7 personas murieron en el naufragio, mientras que
15 sobrevivieron, incluidos todos los miembros de la
tripulación, con la excepción del cocinero del yate, Recaldo
Thomas.
Durante la reunión de dos horas del lunes con los fiscales
del Estado, el capitán respondió a preguntas como si las puertas
y las escotillas estaban cerradas y cuándo sonó la alarma
después de que el Bayesian fuera golpeado por lo que las
autoridades creen que fue un evento meteorológico extremo
localizado y muy poderoso llamado downburst.
Según fuentes de la investigación, también se han tenido en
cuenta los 32 minutos transcurridos entre el momento en que el
superyate de 56 metros de largo empezó a hacer agua y el momento
en que se lanzó una bengala roja desde una balsa salvavidas a
las 4:38 locales del pasado lunes.
Según lo informado, Cutfield fue capitán de yates de lujo en
el Mediterráneo durante años y, en particular, trabajó para un
multimillonario turco anónimo.
Cutfield y su esposa Cristina
residen en Mallorca, donde se casaron el año pasado.
Nacido cerca de Auckland, navega desde que era un niño. Fue
capitán de yates de lujo durante unos ocho años.
Los fiscales del estado interrogaron el lunes también a los
otros miembros de la tripulación del Bayesian.
ANSA confirma que fueron interrogados en el complejo
turístico Domina Zagarella donde se alojan y que más personas
podrían estar bajo investigación en relación con el naufragio.
La investigación oficial abierta sobre la posible
responsabilidad del capitán en el accidente ha sido un paso
clave para que la Fiscalía pueda proceder con las autopsias de
las siete víctimas, que realizarán los médicos del Instituto de
Medicina Legal del Policlínico local, explicaron fuentes.
Los exámenes no se pueden repetir, por lo que los
investigados por la autoridad judicial deberán designar a sus
propios peritos.
Otros miembros de la tripulación que podrían ser
investigados podrían ser el segundo del capitán y el guardia la
noche del naufragio, según fuentes bien informadas.
La cuestión de si alguna de las escotillas o entradas del
yate se dejaron abiertas y si la quilla se elevó, lo que hizo
que el barco perdiera estabilidad, se considera fundamental para
la investigación de un naufragio que ha desconcertado a los
expertos navales que consideran que un barco como el Bayesian
debería haber resistido el temporal o al menos no debería
haberse hundido tan rápidamente.
El yate ha sido descrito como insumergible por expertos como
Franco Romani, que trabaja para el fabricante de alta gama del
barco, el astillero Perini Navi.
El Bayesian era uno de una serie de "10 barcos", de "una
línea que estaba más que consolidada", dijo, describiéndolos
como "barcos que pueden hacer cualquier cosa".
Romani dijo que creía que una gran escotilla lateral estaba
abierta porque, "si cierras todo, el agua no entra: en
condiciones extremas, el barco puede balancearse tanto como
quiera, pero no se hunde".
El fiscal Raffaele Cammarano está coordinando la
investigación sobre el naufragio, en el que también murieron
Jonathan Bloomer, presidente de Morgan Stanley International, su
esposa Anne Elizabeth, el abogado de Lynch Chris Morvillo, la
esposa de este último Nada, y el chef Thomas.
Los pasajeros no tuvieron tiempo de escapar porque estaban
durmiendo en sus camarotes, dijo el fiscal.
El magnate Lynch, de 59 años, apodado el Bill Gates
británico, había invitado a sus amigos y familiares a un crucero
para celebrar el exitoso fin de una batalla legal de 12 años
para limpiar su nombre vinculada a la venta de su empresa
Autonomy por 11 mil millones de dólares a Hewlett-Packard en
2011.
HP había acusado a Lynch de engaño.
Esme Lynch, de 21 años, recordó a su hermana menor Hannah,
diciendo: "Ella es mi angelito, mi estrella".
Hannah Lynch acababa de ganar una plaza en la Universidad de
Oxford. Quienes la conocían decían que era una estudiante
modelo, amante de los libros y la poesía, que después de
graduarse en una de las escuelas más exclusivas del Reino Unido
se preparaba para ascender a la prestigiosa universidad.
"Era una supernova, determinada y obstinada", dijo un amigo.
Un amigo de su padre lo llamó "una de las mentes más
brillantes que he conocido".
La esposa de Lynch, Angela Bacares, estaba entre las 15
personas rescatadas.
El nombre del yate proviene de la teoría bayesiana, la base
de la tesis doctoral de Lynch y el software de su empresa.
La familia Lynch agradeció el viernes a las autoridades
italianas por su asistencia en la tragedia.
"Como miembros de la familia Lynch estamos devastados, en
estado de shock y somos reconfortados y apoyados por nuestra
familia y amigos. "Nuestros pensamientos en este momento están
con todos los afectados por la tragedia".
"Agradecemos sinceramente a la guardia costera italiana, a
los servicios de emergencia y a todos los que contribuyeron al
rescate", dijeron en un comunicado.
"Ahora pedimos que se respete nuestra privacidad en este
momento de dolor indescriptible".
Los buzos de los bomberos italianos que recuperaron los
cuerpos dijeron que "siempre nos llaman para operaciones al
límite, catástrofes. Bajamos a 50 metros, trabajamos en
condiciones extremas y con gran riesgo, pero no somos
superhéroes". Los mismos hombres que trabajaron en el desastre
del Costa Concordia del 13 al 14 de enero de 2012 en el que
murieron 33 personas.
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