En una sala semivacía -nadie era parte civil- y en presencia únicamente del fiscal y de la defensa, concluyó el proceso judicial contra la mujer, encarcelada desde hace más de un año.
La Fiscalía, representada por el fiscal adjunto de la Dirección Distrital Antimafia (DDA) Gianluca de Leo, había pedido una pena de 20 años, pero el juez de instrucción la redujo a 14. Una pena muy grave teniendo en cuenta que el proceso se llevó a cabo con el procedimiento abreviado que da derecho a un descuento de un tercio. Se declara prescrito el delito de recepción de bienes robados.
Muy unida a su hermano, que sólo le había confiado a ella que estaba gravemente enfermo, Rosalía Messina Denaro es la madre de Lorenza Guttadauro, una abogada que, desde el día de su detención, defendió al jefe de la mafia, y esposa de Filippo Guttadauro, que cumplió 14 años por asociación mafiosa y todavía se encuentra en prisión bajo la llamada "cadena perpetua blanca".
El menor de sus hijos, Francesco, sobrino favorito del padrino de Trapani, considerado por muchos su potencial sucesor, cumple una condena de 16 años por asociación mafiosa.
Y en la celda que cumple condena también se encuentran otra hermana del exprófugo, Patrizia, y dos cuñados. Un solo corazón con la Cosa Nostra, una personalidad negativa, "alarmante": así describieron los jueces del Tribunal de Revisión de Palermo a la hermana del jefe al rechazar su pedido de liberación.
Por lo tanto, mucho más que una cómplice, más bien una especie de ayudante del jefe de la mafia, en cuyo nombre gestionaba los negocios y las comunicaciones.
Ella era la encargada de enviar los "pizzini", pequeñas notas escritas que se utilizan como una forma de comunicación secreta entre los miembros de la mafia. Estos textos suelen ser muy breves y están escritos de manera cifrada o en clave para evitar que personas ajenas puedan entender su contenido. Los "pizzini" pueden contener instrucciones, órdenes, información sobre actividades ilícitas, nombres de personas involucradas, lugares de encuentro, entre otros detalles relevantes para la organización criminal.
"Los elementos recogidos durante las investigaciones han puesto de relieve la contribución real realizada de manera convencida y consciente por la sospechosa dentro de la asociación, transmitiendo información, ejecutando las directivas del patrón y administrando el fondo común, todo como preciosa y fiel ejecutora de las directivas del capo mafioso fugitivo y además actúa con pleno conocimiento de temas, cuestiones, nombres en clave y señales", escribió el tribunal sobre Rosalía.
Los jueces subrayaron la "estrecha, prolongada y variada interpenetración de la mujer con la Cosa Nostra" y su "arraigada y estable contribución ofrecida dentro de la asociación en diversos ámbitos, como la coordinación del sistema de transmisión de comunicaciones de forma continua y fiduciaria".
Rosalía Messina Denaro, por tanto, habría sido "una transmisora ;;habitual de mensajes para permitir que su hermano continuara ejerciendo sus funciones directivas, ocupándose de tareas que involucran a terceros, gestionando el fondo común de la asociación y preparando los informes oportunos".
Paradójicamente, ella, la hermana de mayor confianza, contribuyó involuntariamente a la captura del padrino.
En la pata de una silla de su casa de Castelvetrano, el Cuerpo de Ejército encontró, en diciembre de 2022, una nota sobre las condiciones de salud de un paciente con cáncer.
Fue el insumo de la investigación que, a través de controles en la base de datos del Ministerio de Salud, condujo a los carabinieri al alias utilizado por el prófugo que estaba siendo tratado contra un cáncer en Palermo con el nombre de Andrea Bonafede.
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