Naciones Unidas también se declaró "profundamente angustiadas" por el hecho de que los grupos armados palestinos "tengan todavía muchos rehenes".
En la operación murieron más de 270 palestinos, entre ellos mujeres y niños, además de un militar israelí. En la operación también resultaron heridas 400 personas.
Estas acciones, por ambas partes, "pueden constituir crímenes de guerra", dijo hoy en Ginebra Jeremy Laurence, portavoz de la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos.
En el bombardeo israelí del fin de semana, según se informó, "cientos de palestinos, muchos de ellos civiles, fueron asesinados y heridos. La forma en que se llevó a cabo la incursión en una zona tan densamente poblada plantea serias dudas sobre si las fuerzas israelíes respetaron los principios de distinción, proporcionalidad y precaución, tal como establecen las leyes de la guerra", dijo el portavoz en una rueda de prensa.
"Nuestra Oficina -continuó- está también profundamente afligida por el hecho de que los grupos armados palestinos continúen teniendo muchos rehenes, la mayoría de ellos civiles, una conducta prohibida por el derecho internacional humanitario.
Además, al tener rehenes en áreas tan densamente pobladas, los grupos armados ponen en peligro la vida de los civiles palestinos, así como la de los propios rehenes", agregó.
(ANSA-AFP).
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