El proyecto de ley -que Borghi dice haber entregado al Senado- pretende anular la obligación introducida en nuestro país por una ley de 1998 de exhibir en los edificios públicos la bandera Tricolor también la azul con las 12 estrellas de Europa.
"La bandera italiana es una sola: la Tricolor -subraya el senador- acompañada cuando sea posible por la bandera de la Región". Borghi, entre otras cosas, por toda la jornada defiende su línea replicando vía redes sociales a las críticas y posteando las imágenes de los Parlamentos de otros países europeos donde la bandera no está expuesta.
"La obligación -evidencia- la tenemos solo nosotros. Mi propuesta es europeísta pues apunta a adecuarnos a los estándares de los otros países". Se trata -en cualquier caso- de un texto con su firma y que en el partido se comenta como una iniciativa personal.
Pero, por otra parte, es un hecho de que la crítica a Bruselas es una de las figuras de la campaña del partido en vista de las elecciones europeas con tanto de eslogan "Más Italia, menos Europa".
Y entre los aliados, mientras Hermanos de Italia (FDI) calla, llegan las estocadas de los azules, que reivindican desde siempre su perfil europeísta. "Es el calor... evidentemente todavía no han encendido el aire acondicionado en el Senado...", bromea el líder del grupo Forza Italia en la Cámara, Paolo Barelli.
"Uno se pregunta para qué se postulan", pregunta otro azul, el líder del grupo Forza Italia en el Parlamento Europeo, Fulvio Martusciello. Pero es desde la oposición de donde provienen las críticas más duras, aderezadas también con cierto sarcasmo. "Me parece un paso adelante. Salvini ni siquiera se reconoció en el Tricolor... Espero pronto una propuesta para las banderas de los distritos, los barrios y circunscripciones. De Ventotene al patio de casa. Viva Europa", dice la líder del grupo del Partido Democrático en la Cámara, Chiara Braga.
"No la inflación o el crecimiento inexistente y la industria que sigue colapsando sino la bandera de Europa fuera de los edificios, estas son las prioridades de la Liga...", ataca el presidente de los senadores del M5S, Stefano Patuanelli. Y también hay quienes, como el candidato de los Estados Unidos de Europa, Graham Watson, piden una intervención de la propia premier Giorgia Meloni. Sandra Mastella además se desquita con Borghi ("es un ataque a nuestra identidad"). Mientras que el diputado de IV, Luigi Marattin, dice sin rodeos: "Esperamos que tarde o temprano sean los italianos, con su voto libre, quienes saquen a Claudio Borghi de los edificios públicos".
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