En el espléndido escenario del Palacio Barolo y en el ciclo de eventos organizado por la Embajada de Italia en Buenos Aires para la promoción de la candidatura de Roma como sede de la Exposición Universal (EXPO) de 2030, emerge la exposición fotográfica "Dolce Roma: fotografías de Tazio Secchiaroli".
La muestra, comisariada por Giovanna Bertelli, a través de casi 100 paneles, recorre la vida profesional de uno de los más grandes fotógrafos del siglo XX.
Secchiaroli fue el primero en inmortalizar las animadas noches romanas a través de sus tomas, ayudando a hacer famosa en todo el mundo la atmósfera mágica de la capital italiana, que luego Federico Fellini cristalizó en "La Dolce Vita".
Finalmente, la elección del emblemático Palazzo Barolo como sede de la exposición no es casual. Diseñado por el arquitecto italiano Mario Palanti y una de las obras arquitectónicas más distintivas de Buenos Aires, el Palacio -cuyo centenario se celebra este año- es un símbolo del profundo vínculo cultural que siempre ha unido a Italia y Argentina.
"Es una exposición sobre uno de los autores más importantes de la fotografía italiana moderna y la cultura es uno de los grandes lazos que unen a Argentina e Italia", dijo el embajador Fabrizio Lucentini en su discurso inaugural de la exposición.
"La elección no es casual entonces, ya que Roma es candidata a albergar la Expo Universal 2030 y con esta iniciativa y otras que hemos organizado y estamos organizando, queremos resaltar la importancia de nuestros lazos y lo importante que sería para esta razón por la cual la Argentina apoya la candidatura de Roma", agregó el diplomático.
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