El arzobispado de Puerto Príncipe confirmó la liberación, según informa hoy Vatican News. Según fuentes periodísticas, el rescate no fue pagado.
Al menos veinte personas murieron en el ataque perpetrado por las bandas armadas de Vivre Ensemble (Vivir juntos), lideradas por el ex policía Jimmy Cherizier, que atacaron la subcomisaría de policía de Gressier.
Cherizier es conocido por estar en el origen del caos en el país y del llamamiento a la dimisión del entonces primer ministro Ariel Henry en marzo.
En Gressier, grupos armados quemaron viviendas y provocaron el pánico en la comunidad, a pesar de la presencia desde hace varios días del contingente de paz liderado por Kenia.
La policía ha recuperado ahora el control de la comisaría.
La indignación y el dolor por una situación que demuestra un "encarcelamiento pasivo en la espiral del mal" que devora a la sociedad haitiana, fueron expresados ;;por el arzobispo de Puerto Príncipe en un comunicado fechado el 1 de julio, cuando denunció lo ocurrido, definiéndolo "actos indescriptibles de violencia mortal".
El texto describe al religioso secuestrado como un pastor, "que nunca ha abandonado la comunidad de la que es responsable", leemos en el texto del arzobispo, "y que está siempre disponible para servir a ambas".
El arzobispado de Puerto Príncipe, indicó también que tras el incidente "algunas zonas de la región metropolitana de Puerto Príncipe todavía escapan al control de las fuerzas públicas", expresó su indignación "ante estos actos que deliberadamente violan los derechos de la población" y reafirmó "su cercanía a todas las víctimas y sus familiares".
El comunicado recordó "a las autoridades estatales la urgencia de tomar acciones que pongan fin a esta situación de violencia y restablezcan el derecho a la vida en el país".
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