Al menos 8.000 personas, en su mayoría jóvenes, corearon las canciones y aclamaron con delirio a la banda italiana Maneskin, durante su debut en el Pepsi Center WTC, uno de los principales escenarios musicales de la capital, durante su debut enmarcado en su periplo internacional.
Aún a la hora de hacer oír su melodía icónica "Zitti e Buoni", los asistentes reaccionaron de forma opuesta al significado de esta canción, es decir, "ni buenos ni bien portados", sino contagiados por un verdadero rapto de locura.
Inclusive, en una parte del concierto, que incluyó un ampio repertorio de sus mejores piezas, cuando interpretaron "Touch Me", descendieron del escenario para dejarse tocar por sus seguidores y en "Lividi Sui Gomiti" permitieron a dos decenas de fans subir a la plataforma para bailar con ellos.
El cuarteto italiano de rock, formado por el vocalista Damiano David, la bajista Victoria de Angelis, el guitarrista Thomas Raggi y el baterista Ethan Torchio, también interpretaron el nuevo tema "Cool Kids", que según anticiparon estará en su próximo disco, aunque el cantante se rehusó a revelar cuándo saldrá.
Vestidos de colores negro y plateado, los integrantes de la banda que ha ganado, entre otras cosas, el festival de San Remo y el de Eurovisión, captaron rápidamente la simpatía de la gente al pronunciar algunas palabras en español, con frases como "hace mucho calor", pronunciada por Damiano.
En algún momento, la gente se arremolinó en el centro del escenario, amenazando con traspasar las vallas, pero Damiano les pidió "parar por dos minutos" para que "dejen de empujar, porque hay gente atrapada".
"Cuidado, nos ayudan y seguimos", afirmó ante frenéticos jóvenes que al bailar melodías como "Chosen" y "Coraline" se empujaban entre sí, pero no se suscitaron incidentes.
Maneskin, que han triunfado en festivales como Coachella y Lollapalooza, también logró en México desatar una gran euforia y se convirtieron en un fenómeno inusual por cuanto las grandes bandas de rock extranjero suelen venir de Estados Unidos o Inglaterra y de Italia sólo llegan exponentes de la ópera o instrumentistas.
La que parecía una fase ordinaria de su gira mundial "Loud Kids Gets Louder" (Los chicos ruidosos están cada vez más ruidosos), se convirtió en un momento inolvidable y los fans mexicanos del grupo estuvieron por mucho rato "fuiori di testa" (desquiciados),como reza la letra de su más memorable melodía.
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