Aunque la esperanza de vida media en Italia es hoy de unos 84 años, la esperanza de vida saludable no alcanza los 60 años.
Pero envejecer manteniéndose joven, a través de la actividad deportiva y siguiendo una dieta adecuada, es un objetivo que hoy se puede alcanzar trabajando de manera científica.
La calidad de vida y la promoción de una longevidad saludable se habló en la quinta edición del congreso internacional "Healthy Lifespan - Positive nutrition, antiinflammation diet, physical activity and sport", organizado por la Fundación Paolo Sorbini y promovido por Enervit y Technogym, en el Palazzo Mezzanotte de Milán.
Según los datos de ISTAT (Instituto de Estadísticas) reportados en el Informe Anual de 2023, a finales de 2022 la población italiana de más de 65 años superó los 14 millones de individuos, lo que representa el 24,1% de la población total; los mayores de 80 años son 4 millones 529 mil, equivalentes al 7,7% de la población, y también están aumentando en Milán, donde -como explicó el alcalde Giuseppe Sala presente en el congreso- a finales de 2023 había más de 117 mil ciudadanos mayores de 80 años.
Una vida más larga, sin embargo, no se traduce necesariamente en una vida sana y de calidad, ya que la esperanza de vida saludable en Italia se detiene en menos de 60 años: "Esta condición significa que cada uno de nosotros debe esperar vivir una cuarta parte de su vida en un estado de enfermedad",comentó Giovanni Scapagnini, profesor titular de Nutrición Clínica en la Universidad de Molise y vicepresidente de la Sociedad Italiana de Nutracéutica (Sinut).
"Afortunadamente, la ciencia nos ha demostrado que la aguja de la báscula se puede mover hacia un envejecimiento saludable.
Los pilares que nos permiten seguir siendo jóvenes en los que podemos trabajar de manera efectiva son variables, como la alimentación, la actividad física y la gestión del estrés", agregó.
Durante el evento, una serie de expertos internacionales discutieron sobre los principales aspectos relacionados con la mejora de la calidad de vida y la promoción de una longevidad saludable, presentando estudios y participando en una mesa redonda moderada por el periodista Mario Calabresi.
Entre otros, estuvo presente Alberto Albanese, profesor del Instituto Clínico Humanitas Rozzano y presidente de la Asociación Internacional sobre síndromes parkinsonianas y enfermedades relacionadas, quien destacó cómo ya se ha demostrado que "una nutrición adecuada, asociada al ejercicio físico regular, puede reducir significativamente el riesgo de aparición de enfermedades neurodegenerativas como el Parkinson y el Alzheimer".
Alberto Mantovani, profesor emérito de la Universidad Humanitas y director científico del IRCCS Instituto Clínico Humanitas, se dijo "extremadamente preocupado" porque Italia "en este momento es superada solo por España en número de niños con sobrepeso y tenemos el récord de niños inactivos que no hacen actividad física".
Y tener sobrepeso, concluyó Mantovani, es la base para "desorientar el sistema inmunológico" mientras que "hacer actividad física, junto con las vacunas, es una forma de entrenamiento de nuestro sistema inmunológico que es una orquesta extraordinaria, de la que no conocemos todos los instrumentos, orquestales y partituras".
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Copyright ANSA