"Para Danielito, mi querido nietito. Nunca te olvides de la noche en la que tu abuelo triunfó", eso escribió el notable compositor argentino Astor Piazzolla en el programa de la velada que se organizó en su honor, en 1983, en el Teatro Colón de Buenos Aires, templo internacional de la lírica y el ballet.
"Lo del Colón fue una experiencia hermosa que mi abuelo me dio la oportunidad de vivir. Porque la verdad es que yo tenía once años y llevar a un chico a un concierto tan importante no era nada fácil. Pero yo me portaba muy bien y por eso me invitó.
Fue increíble, primero, verlo ensayar. Después, estar con él toda la noche, verlo desde el palco. Fue una noche inolvidable para mí y lo más importante", contó "Pipi" Piazzolla en una entrevista con la agencia Télam Esa fascinante velada seguramente estuvo hoy en el recuerdo de Daniel Piazzolla al subir al escenario en la ciudad italiana de Trani, frente al mar Adriático, en la décima edición del festival que honra el recorrido musical de su abuelo, un innovador del tango, un compositor de leyenda.
Y en el lugar donde están las raíces familiares. Donde empezó su historia.
Astor también contribuyó en el desarrollo musical de su nieto.
"Que me haya regalado mi primera batería fue una gran ayuda. Estuve un año y pico estudiando batería y tocando sobre los muebles. Hasta que él se enteró. Entonces me llamó a su casa para ir a tomar el té y me llevó al cuarto donde componía. Ahí me dio un sobre: 'Tomá, para que te compres la batería'. Para mí fue una ayuda enorme", contó más de una vez "Pipi", orgulloso de su abuelo.
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