De todos modos, las acciones de la empresa procesadora caen en Wall Street, donde pierde más del 3% y quema 100 mil millones de capitalización en un día positivo para las bolsas estadounidenses gracias a la estabilidad de la economía, según los datos sobre el PIB que creció en un 3%, ante el aumento de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal.
Lo decepcionante para Nvidia fueron las estimaciones de ingresos para los tres meses actuales, alrededor de 32,5 mil millones de dólares, "más o menos un 2%", que no lograron satisfacer del todo a los inversores, acostumbrados a que el gigante de los semiconductores haga previsiones mucho más ambiciosas.
Nvidia, dicen algunos analistas, ha superado las expectativas pero no ha logrado igualar el desempeño estelar de los últimos seis trimestres. Para justificar un repunte de 2 billones de dólares en un año y una capitalización de 3,1 billones - añaden -, Nvidia debería haber presentado un trimestre perfecto y en cambio no lo hizo, provocando una ola de ventas.
Para Vivek Arya, del Bank of America, sin embargo, la caída de las acciones es sólo temporal porque Nvidia sigue presentando "una oportunidad de crecimiento única a una valoración muy razonable".
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