"¿Cómo me siento? No muy bien porque cuando lo das todo y obtienes sólo el cuarto y el quinto tiempo no es algo grandioso", resumió el monegasco Charles Leclerc, quien tras marcar el ritmo en la única sesión libre del viernes, no pudo repetir en la "Sprint Shootout" que definió la grilla de la última "Sprint Race" del año, que se correrá el sábado en Losail.
"No sé cuál fue el motivo por el cual la sesión libre superó nuestras propias expectativas", resumió Leclerc, que saldrá mañana desde el quinto puesto, uno por detrás de su compañero en Ferrari, el español Carlos Sainz, quien moverá desde la segunda fila flanqueado por el australiano Oscar Piastri en una grilla que tendrá en la pole al británico Lando Norris junto a su compatriota George Russell.
Ferrari y McLaren luchan por el único título de la Fórmula 1 que resta por definirse en esta temporada: la Copa de Constructores, que el equipo italiano no celebra desde hace 16 años y en la que marcha 24 unidades por detrás de la escudería con sede en Woking, tras la consagración anticipada el neerlandés Max Verstappen como tetracampeón mundial en Las Vegas, el pasado domingo.
"La Sprint Shootout nos hizo volver a poner los pies sobre la tierra", admitió Leclerc, tercero en el Mundial de Pilotos por detrás de Norris, al aludir a esa disputa por el título de la Copa de Constructores y reconocer que "este fin de semana es muy importante para nosotros y esperamos que en carrera las condiciones cambien".
Una frase que resume lo que hay en juego en esta última "Sprint Race" de la temporada que otorgará puntos que pueden ser vitales antes de disputarse el Gran Premio de Qatar propiamente dicho, penúltimo del año en el que Ferrari buscará acortar distancias con McLaren, que se anuncia como el gran candidato a la victoria.
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