"Frank Chamizo, durante la rueda de prensa de hoy, hizo algunas declaraciones que fueron interpretadas como muy críticas hacia la Federación Mundial de Lucha Libre UWW, pero declara que sus reflexiones fueron forzosamente intencionadas de manera agresiva, mientras que, por el contrario, simplemente querían expresar la dificultad del sistema de clasificación olímpica, que es particularmente duro en la lucha libre", se lee en una nota de la FIJLKAM.
"Frank Chamizo también expresó su convicción de que gracias al trabajo duro podrá sacar provecho de su determinación de permanecer en la cima de la disciplina mundial", concluye la nota de la FIJLKAM.
Chamizo había asegurado que seguiría "trabajando duro y buscando la fuerza para soportar esta injusticia" luego de la confirmación de su derrota contra el azerbaiyano Turan Bayramov pese a la sanción contra los árbitros de ese combate por semifinales del Preolímpico europeo de lucha disputado en Bakú en abril pasado.
El italiano, medalla de bronce en la prueba de lucha libre de los Juegos Olímpicos de Río 2016, había denunciado "sobornos y corrupción" luego de su derrota contra Bayramov en un combate de semifinales de la categoría hasta 74 kilogramos del torneo que otorgaba la clasificación a París 2024.
La UWW había instado a Chamizo a hablar más después de la denuncia por lo ocurrido en Bakú, y el atleta cubano nacionalizado "azzurro" contó que lo resolvió una "gran ayuda" del presidente del Comité Olímpico Italiano (CONI), Giovanni Malagó.
"Me llamaron muchos compañeros y me transmitieron su cercanía.
Pero no soy el único al que le pasa algo así. Les pasa a muchos deportistas que no tienen el público que yo tengo y no son escuchados. Creo que me rompí una fachada", enfatizó Chamizo.
Luego de lo ocurrido en Bakú y ante las ausencias del ruso Zaurbek Sidakov y del bielorruso Magomedkhabib Kadzimahamedau, la UWV decidió reasignar un total de 16 cupos para París 2024 y Chamizo fue uno de los beneficiados por ser el mejor clasificado en la categoría hasta 74 kilogramos.
Durante la presentación del equipo olímpico italiano en el centro deportivo Giulio Onesti, el atleta de 31 años fue consultado sobre la posibilidad de volver a encontrarse en París 2024 con los árbitros de Bakú.
"Ya lo dije, mejor que no los vea, si no, deberán agarrarme. Si me ven, que se aleje, porque el hecho de que ellos hayan sido admitidos antes que yo es vergonzoso", aseveró Chamizo, quien calificó como "una locura" y "una desventaja" haber sido confirmado para París 2024 a 23 días del inicio de los Juegos Olímpicos.
"Ahora necesito magia, pero algo inventaremos", confió Chamizo sobre sus posibilidades de ganar una medalla en París 2024, tras lo cual reveló que de lo ocurrido en Bakú "aprendí que debo quedarme callado".
"Entendí que la verdad muchas veces escandaliza", completó Chamizo, quien también narró que durante el torneo de Bakú le ofrecieron 300 mil dólares para dejarse perder.
"Siento que no llego a tiempo a las Olimpíadas", alertó Chamizo, quien reconoció estar un estado de forma "muy bajo" por lo cual estima que llegará a París 2024 "al 50%" de su nivel.
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