Inter no contó hoy con su lesionado capitán y goleador argentino Lautaro Martínez, pero superó por 2-0 a Lecce de local y recuperó la ventaja en la cima del campeonato, en una decimoséptima fecha en la que Hellas Verona se impuso por idéntico marcador y en la misma condición a Cagliari y lo dejó en zona de descenso.
De punta a punta, así está esta jornada que cerrarán Roma y Napoli en el Estadio Olímpico y que arrancó con el triunfo de Juventus por 2-1 ante Frosinone que obligaba a Inter a ganar para poder celebrar la Navidad "como Dios manda".
El alemán Yann Bisseck a los 43' de cabeza abrió la cuenta para el equipo de Simone Inzaghi, que sentenció el partido con un gol de Nicoló Barella a los 78' tras una gran definición en la que participó el austríaco Marko Arnautovic al devolverle una "pared" de taco en el área que sorprendió a la zaga del Lecce.
Martínez, artillero del campeonato con 15 festejos que también se perderá el próximo partido con Génova del próximo viernes, observó hoy desde el palco del Giuseppe Meazza debido a una lesión muscular en el aductor del muslo izquierdo.
El argentino volvería al ruedo el 6 de enero frente a Hellas Verona, rival ante el cual se había perdido su último partido, aquella vez por sanción, el 9 de abril de 2022.
Sin él y con otras ausencias que supo disimular, Inter dio cuenta del Lecce entrenado por Roberto D'Aversa, quien en la previa advertía del peligro que representaba tras la eliminación que sufrió en octavos de la Copa Italia, en la que defendía el título obtenido en las pasadas dos temporadas, a manos del sorprendente Bologna.
Un Bologna que más temprano derrotó a Atalanta, se afirmó en el cuarto puesto y se confirmó como el equipo más efectivo del torneo junto con Inter jugando como local, condición en la que ambos sumaron 22 unidades producto de siete triunfos en nueve partidos, de los cuales sólo perdieron uno.
Lecce mantuvo la tendencia que lo convierte en uno de los cuatro (junto con Cagliari, Salernitana y Frosinone) que no cantó victoria en el campeonato fuera de casa, condición en la cual suma tres derrotas y cinco empates en ocho partidos.
Un gol en cada período le bastó a Inter para marcar diferencias que pudieron haber sido mayores ante un rival que pelea por distintos objetivos (la permanencia) y dio pelea hasta que el equipo de Inzaghi acertó por primera vez frente al arco de Wladimiro Falcone una de las situaciones de riesgo generadas.
Paciencia pareció ser la consigna esta tarde ante unos 73 mil espectadores, vía por la cual Barella y Arnautovic construyeron la mejor jugada del partido para definir un duelo que estaba definido desde hacía rato, más aún cuando el árbitro Matteo Marcenaro expulsó al zambiano Lameck Banda por exceso verbal.
Inter ganó ante un rival que lo esperó replegado para responder con algún contragolpe aislado, como cuando generó la primera llegada del partido con un derechazo del español Joan González que obligó a la respuesta del suizo Yann Sommer.
Apenas un sobresalto para Inter, que rápidamente retomó el control y llegó con un remate de Arnautovic que Falcone rechazó con un pie, negándole la revancha de la opaca actuación en Copa Italia, aunque luego sería el propio austríaco el que dilapidaría otra ocasión al errarle al arco mano a mano con el arquero.
Con la posesión del balón (76 por ciento) como principal virtud, Inter manejó el trámite ante un Lecce que se enfocó en cerrarle los espacios, pero que no contaba con el adelantamiento de Bisseck, quien tras sacudir el travesaño sí tuvo revancha al conectar de cabeza y de espaldas al arco un centro del turco Hakan Calhanoglu para celebrar su primer gol con esta casaca.
Lecce casi sorprende en la agonía de ese capítulo con una llegada que el brasileño Gabriel Strefezza desvió por muy poco como para confirmar que el partido no estaba cerrado.
En el arranque del complemento, el equipo de D'Aversa casi se encuentra con una chance inmejorable para empatar cuando Marcenaro sancionó con penal una supuesta mano en el área del brasileño Carlos Augusto, pero el VAR corrigió el error.
Lecce presionó un poco más arriba, situación que resultó propicia para los contragolpes de Inter, que volvió a llegar con peligro cuando las acciones se hicieron de ida y vuelta, hasta que Arnautovic decidió reivindicarse y con un taco magistral habilitó a Barella para que, con frialdad, sentenciara el 2-0 y le bajara el telón al partido.
El gol puso nerviosos a los jugadores de Lecce, especialmente a Banda que se fue a las duchas por su airada protesta ante una falta no sancionada, situación que Inter aprovechó para regular energías, aún cuando tuvo opciones como para estirar su ventaja con el francés Benjamin Pavard, el albanés Kristjan Asllani y Francesco Acerbi, frustrados por Falcone, decisivo en una derrota más decorosa.
Inter volvió a quedar a cuatro puntos de Juventus y pase lo que pase en la próxima fecha cerrará el año en la cima, con 11 de ventaja sobre Milan, su clásico rival que, por el contrario, despedirá el 2023 sumido en una crisis y está apenas dos por delante del sorprendente Bologna, hoy por hoy clasificado a la próxima edición de la Champions.
Del otro lado de la tabla respira Hellas Verona, gracias al triunfo que logró frente a Cagliari en un duelo directo por la permanencia, aún cuando restarán dos fechas para el cierre de la primera rueda y toda la segunda.
El belga Cyril Ngonge a los 53' y el bosnio Milan Djuric a los 90' decretaron el triunfo del equipo de Marco Baroni ante los de Claudio Ranieri, que terminaron con diez por la expulsión del congoleño Antoine Makoumbou a los 51'.
Hellas aprovechó de inmediato esa ventaja numérica para marcar diferencias con un Cagliari que había tenido opciones en el primer capítulo para ponerse en ventaja, incluido un remate en el poste de Matteo Prati a los 11', un gol anulado a los 38' por posición fuera de juego de Edoardo Goldinaga (reemplazado a los 86' por el ítalo-peruano Gianluca Lapadula) y dos chances desperdiciadas por el uruguayo Nahitan Nández.
No las concretó y terminó pagándolo caro ante un rival que se reencontró con el triunfo después de mucho tiempo, lo superó en la tabla y salió de la zona de descenso pues ahora tiene 14 puntos, los mismos que Udinese, que más temprano igualó 1-1 en campo del Torino, y uno por encima de Cagliari, que precede a Empoli (12) y a Salernitana (9).
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