"El empate no es lo que vinimos a buscar, pero sirve por como se dio", resumió Stefano Pioli, técnico de un Milan que empató hoy frente a la Roma en tiempo de descuento un partido que perdía también en tiempo de descuento.
"No jugamos mal, pero sabíamos que Roma no había recibido goles en el Olímpico y que sería difícil convertirle", reconoció el entrenador "rossonero" al celebrar que su equipo al menos no se fue con las manos vacías.
"Apuntabamos a ganar porque estamos bien, el grupo está unido y queremos alcanzar los objetivos", destacó al aludir a la semifinal que Milan jugará con Inter en la Champions, a cuya próxima edición aspira a clasificarse.
Hoy por hoy y tras lo sucedido en el Olímpico, Milan y Roma comparten el cuarto puesto, último que otorga una plaza al torneo continental por la que también pelea Inter, que podría alcanzarlos mañana si derrota en San Siro a la escolta Lazio.
Consultado sobre qué le faltó a Milan para ganar esta tarde, Pioli respondió: "La jugada" para desnivelar porque "atacamos demasiado por afuera cuando debíamos hacerlo por adentro".
"Podemos hacerlo mejor, pero hay que tener en cuenta que este es el séptimo partido que jugamos en 21 días", explicó antes de responder que "para que un partido tenga ritmo hacen falta dos", aludiendo también al plantel que presentó la Roma de José Mourinho.
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