Sun, que tiene en su colección un Giacometti de 78 millones comprado en 2021, siguió la subasta desde Hong Kong y pagó en criptomonedas. Luego de tener en sus manos al Comedian, dio a conocer que "en los próximos días comerá la banana como parte de esta experiencia artística única, honrando su papel tanto en la historia del arte como en la cultura pop".
El plátano en cuestión había sido comprado unas horas antes de la subasta por 35 céntimos en un puesto de frutas y verduras del Upper East Side: junto con la cinta adhesiva gris que lo fija a la pared, debe ser reemplazado periódicamente y esto forma parte del proyecto de Cattelan que había concebido Comedian como una sátira de la especulación del mercado: "¿Sobre qué base un objeto adquiere valor en el sistema del arte?", preguntó el artista famoso en Estados Unidos por el inodoro de oro macizo instalado en 2016 al Guggenheim.
Más recientemente, el propio Cattelan había añadido que "la subasta será el pináculo de la carrera de Comedian. Estoy ansioso por ver cuáles serán las respuestas".
Comedian había debutado en Art Basel Miami, donde la galería Perrotin vendió tres ediciones, dos por 120 mil dólares y la tercera por 150 mil, pagadas por un comprador anónimo que luego la donó al Guggenheim.
Durante la feria, el artista David Datuna se comió uno, lo que obligó a Perrotin a cerrar el stand antes de tiempo. El año pasado, un estudiante de arte surcoreano comió otro plátano en el museo de la fundación Samsung de Seúl: el joven se justificó diciendo que tenía "hambre".
Uno de los conceptos detrás de la instalación es que sus piezas deben regenerarse continuamente. "No es sólo una obra de arte", dijo Sun a Sotheby's: "Comedian es un fenómeno cultural que une los mundos del arte, los memes y la comunidad de las criptomonedas e inspirará más debates en el futuro".
El caso es que incluso antes de ser subastado, el plátano fue objeto de atención cuando, a principios de noviembre, el ejecutivo de Sotheby's, Michael Bouhanna, lanzó de forma anónima una criptomoneda inspirada en Cattelan y llamada $Ban.
Inmediatamente acusado de haber utilizado información confidencial para beneficiarse del aumento del precio del token, el ejecutivo lo negó, declarando que había "elegido lanzarlo de forma anónima como un hobby", por lo tanto sin asociaciones con su perfil personal de Two Sun.
Los rivales en la subasta de Sotheby's habían invertido en la criptomoneda de Bouhanna. Uno de los dos, Theodore Bi, quería comprar Comedian como regalo para Elon Musk, pero se había detenido en el umbral de los 2,5 millones de dólares.
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