Después de las icónicas instalaciones en el corazón de Roma, la capital rinde homenaje al artista con la mayor muestra jamás realizada en Italia: más de 120 obras maestras, entre pinturas, acuarelas, carbonillas, esculturas y algunos inéditos que abarcan 60 años de carrera artística.
La exposición, comisariada por la hija, Lina Botero, y la experta Cristina Carrillo de Albornoz, cuenta en 11 secciones diferentes la gran maestría de Botero en las diversas técnicas artísticas, desde la pintura hasta la escultura.
Entre las obras expuestas también hay algunos inéditos excepcionales, como 'Menina (Después de Velázquez)' y 'Homenaje a Mantegna', que se creía perdido.
Hasta el 19 de enero, las salas de Palazzo Bonaparte albergarán obras de grandes dimensiones que representan la suntuosa redondez del estilo de Botero, presentado con efectos tridimensionales y colores vivos y vibrantes.
"Es una exposición excepcional porque es la primera gran muestra de pinturas dedicada a Fernando Botero después de su muerte", comenta su hija Lina, "y también es una visión diferente de su trabajo, que destaca la maestría con la que Botero ha trabajado con técnicas diversas a lo largo de su carrera artística".
La exposición explora la extraordinaria relación entre Botero e Italia: "Un vínculo de amor", como lo define su hija, y de gran relevancia para su formación, como subraya Cristina Carrillo de Albornoz.
"En Italia, a los 20 años, cuando se enfrentó a los capolavoros del Renacimiento italiano, en particular Piero della Francesca, Paolo Uccello y Masaccio, con formas masivas y colores extraordinarios, tuvo lugar su metamorfosis", explica Albornoz.
"Botero siempre se interesó por el volumen, desde sus inicios, de manera inconsciente, pero comprendió su trascendencia en el arte al estudiar a los maestros del Quattrocento italiano", añade.
La exposición, de hecho, se abre con una obra nunca antes expuesta: 'Homenaje a Mantegna' (1958), un préstamo de una colección privada de los Estados Unidos que, después de décadas, fue recientemente descubierto por Lina Botero a través de Christie's.
Es un homenaje a una de las obras maestras del Renacimiento, la "Cámara de los esposos" de Mantegna en el Palacio de Mantua.
Otra obra inédita y nunca antes expuesta al público es una versión de la infanta de "Las Meninas" de Velázquez, pintor que Botero copió durante su aprendizaje en el Prado como joven estudiante.
A lo largo de su vida, realizó numerosas versiones de la obra, pero esta expuesta en Roma es mucho más que una simple versión: es una obra nueva, auténtica.
También están presentes sus icónicas series con los temas clásicos que más le interesaban, como la amada América Latina, el circo, la religión, la mitología, la naturaleza muerta y la corrida, interpretada a través del filtro de la tradición hispánica, desde Goya hasta Picasso.
Finalmente, una sala está dedicada a la experimentación más reciente del maestro, quien, desde 2019, pintó con una nueva técnica de acuarelas sobre lienzo en grandes formatos: obras casi diáfanas, fruto de un enfoque delicado hacia los temas familiares de siempre.
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Copyright ANSA