Con una altura de 38 metros, más 19 metros subterráneos, la nueva estructura tiene un total de 17 plantas, once sobre la superficie y seis por debajo, y alberga las oficinas, una nueva sala de ensayos para el ballet, un nuevo espacio ampliado para la zona de bastidores, dos grandes terrazas con vistas a la ciudad y lo que se ha llamado la verdadera joya de este proyecto, la nueva sala de ensayos para la orquesta, que aún no está terminada.
Está situada bajo tierra, a la altura del nivel freático, en la planta 6 subterránea, y está aislada y protegida como un caparazón. Con una altura de 14 metros, diez más que la actual, servirá también de estudio de grabación.
Para completarla, falta el revestimiento acústico, cuya licitación se adjudica ahora y la sala estará lista en la primavera de 2024.
Las obras de la torre duraron dos años, desde la colocación de la primera piedra en abril de 2021, en pleno confinamiento, con una inversión de unos 23 millones de euros, incluida la demolición del edificio anterior.
"Ha sido un trabajo hecho con mucha eficacia", comentó el superintendente de La Scala, Dominique Meyer, que destacóque esta torre ahorrará al teatro casi 400.000 euros al año, con la extinción de las hipotecas y el hecho de que ya no pagará alquiler por las oficinas de la calle Torino.
"Cuando empezamos teníamos las máscarillas puestas, quizá no era el mejor momento, pero lo hicimos y hoy podemos inaugurar la primera parte", destacó.
El revestimiento de la torre es de losas de botticino fiorito. Los proyectistas no ocultaron la complejidad del proyecto, que no solo se extiende en altura sino también varias plantas bajo tierra.
"Hemos trabajado en altura hasta la altura de la torre escénica tradicional, que ya se había levantado en la época de la restauración de la Scala", explica el arquitecto Mario Botta, que trabajó junto con el estudio Emilio Pizzi, "pero también hemos profundizado porque la gran sorpresa está abajo, donde está la sala de ensayos de la orquesta, que es la verdadera joya de esta transformación".
En dos años, a partir de abril de 2021, "hemos conseguido realizar un edificio que no es fácil. Hay espacios nuevos y de calidad", añadió.
La referencia a la torre Velasca en particular por esa forma de voladizo en la parte superior 'me parece algo legítimo y hermoso'.
Desde hoy se puede utilizar la nueva sala de ensayo para danza en la novena planta con magníficas vistas sobre la ciudad, además de las tres ya existentes, el espacio de oficinas hasta la octava planta (los sindicatos, hoy ausentes, han pedido una reunión para hablar de la distribución) y el espacio de descarga y premontaje de los decorados en la zona de bastidores, además de las dos grandes terrazas de las plantas cuarta y sexta, que también se pueden utilizar para eventos privados de los abonados.
Esta nueva torre "es funcional y también bonita porque ahorrará costo y es sostenible", comentó el alcalde milanés Giuseppe Sala, "es un paso, luego habrá otro, aunque lleve más tiempo, con la Magnifica Fabbrica, que reunirá los talleres de la Scala".
La obra de los espacios de via Rubattino "está todavía en una fase inicial porque para que todo empiece quiero estar seguro de que habrá fondos -concluyó-, creo que es un problema de calendario y de diálogo con el Gobierno, pero seguiremos adelante".
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Copyright ANSA