(ANSA) MADRID - Así como gracias a la mecánica cuántica se descubrió cómo los electrones se mueven dentro del átomo, "en un futuro, quizás podría haber un microscopio subnuclear capaz de detectar los movimientos de los quarks dentro de los protones", dice a ANSA el físico italiano Ignazio Scimemi.
A principios del siglo XX, al comenzar a estudiar los átomos, se descubrió que en su interior hay electrones, "con la mecánica cuántica se descubrieron sus movimientos y a partir de ahí llegamos a los transistores y a las computadoras".
Ahora, continúa, "estamos en la estructura subnuclear de los átomos, que son los protones y neutrones. Hace 50 años se descubrió que dentro del protón hay quarks, y la pregunta siempre es cómo se mueve lo que está dentro del envoltorio, en este caso los quarks", señala.
La idea es "replicar el tipo de avance científico que se hizo en su tiempo" gracias a la mecánica cuántica, señala el físico, que lanza al aire la posibilidad de un futuro "microscopio subnuclear".
Radicado en la Facultad de ciencias físicas de la Universidad Complutense de Madrid, donde dirige IPARCOS (Instituto de física de partículas y del cosmos), investiga en tres dimensiones "cómo se comportan los quarks, no solo considerando la misma dirección de movimiento del protón del que son parte, sino también las direcciones transversales, teniendo en cuenta que cada quark funciona como un pequeño imán, lo cual lo complica todo".
A través de experimentos en distintas partes del mundo, se realizan análisis de datos sobre el movimiento de los quarks alrededor de la dirección de aceleración del protón, y ahora las investigaciones se centran en saber "cómo giran los quarks con respecto a un eje o el entrelazamiento entre ellos. Lo que nos falta por saber es cómo los imanes (espines) interaccionan entre sí".
Los análisis de todos los experimentos juntos utilizando también la información dada por la cromodinámica cuántica han culminado en varias publicaciones a partir de 2019.
Esto es lo que él investiga desde 2010, se llamaTransverse momentum distribution (TMD), y está dentro del Proyecto de la Unión Europea (UE) Strong 2020, investigación que también se lleva a cabo, entre otros sitios, en las ciudades italianas de Pavía, Turín y Cagliari.
A Scimemi le gustaría que "en estos grupos de investigación mejoraran las colaboraciones entre las instituciones italianas y las españolas".
Y esto es precisamente lo que se propone el recientemente nombrado agregado científico de la Embajada de Italia en España, Sergio Scopetta, que "explora la posibilidad de que se puedan destinar fondos de la UE o de los gobiernos para que haya colaboraciones entre instituciones", apunta Scimemi.
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Copyright ANSA