ROMA, 8 MAY - El francés Benjamin Thomas se adjudicó hoy la quinta etapa en la centésimo séptima edición del Giro de Italia que se disputó sobre 178 kilómetros entre Génova y Lucca.
El pedalista del equipo Cofidis se impuso con un tiempo de tres horas, 59 minutos y 59 segundos y cerró por delante del danés Michael Valgren (EF Education-EasyPost) y del italiano Andrea Pietrobon (Team Polti Kometa), que completaron el podio de la jornada.
En el cuarto lugar cruzó la meta el también francés Enzo Paleni (Groupama-FDJ), a tres segundos de su compatriota, mientras que en el quinto lo hizo el italiano Jonathan Milan (Lidl-Trek), vencedor en la cuarta etapa y quien hoy quedó a 11 segundos del ganador del día.
Los primeros cuatro fueron los grandes protagonistas de la jornada que se suponía favorable a los velocistas y mantuvieron una cerrada lucha en los últimos 75 kilómetros del recorrido al escaparse del resto del pelotón.
"Fue como una larga persecución en pista y el final resultó ser a toda velocidad", resumió el vencedor Thomas, al confesar que "a 10 kilómetros de la meta empecé a imaginar que podíamos pelear por la victoria porque, además, teníamos viento a favor".
"En el último kilómetro me hizo acordar a Carcassone, en el Tour (de Francia), donde en condiciones muy similares se me escapó el triunfo y pensé que tal vez hoy era mi día. Cuando Pietrobon atacó la punta, sentí que la perdía, pero el destino quiso que mi primera gran victoria fuese en Italia, que es el país en el que vivo", agregó.
El francés se mostró feliz también por haber logrado el primer festejo para Cofidis en esta temporada: "Me alegró mucho ver tan contentos a mis compañeros de equipo", dijo al final de la etapa que se disputó prácticamente completa en llanura con apenas dos Grandes Premios de Montaña de mediana dificultad.
La fracción pareció dividirse en dos y cuando la prueba transitaba Liguria hubo un primer intento de fuga por parte del británico Lewis Askey y del italiano Mattia Bais, a quienes se sumaron luego su compatriota Manuele Tarozzi y el alemán Simon Geschke.
Los fugitivos ingresaron adelante a Bracco, en un Gran Premio de Montaña de tercera categoría ubicado a 60 kilómetros de Géova, pero cuando la competencia se encaminaba rumbo al límite entre Liguria y Toscana, parecieron agotar sus energías y la prueba cambió de protagonistas.
En la etapa de hoy, además de algunas sorpresas, no faltaron las caídas que involucaron a los italianos Alessandro Tonelli y Davide Piganzoli, al canadiense Riley Pickrell y al francés Alan Riou y luego al húngaro Attila Valter, al noruego Tobias Foss, al canadiense Michael Woods, al eritreo Henok Mulubrhan, al italiano Lorenzo Milesi y al israelí Navad Raisberg. Sin sobresaltos concluyó el favorito esloveno Tadej Pogacar (UAE Emirates Team), quien retuvo la casaca rosa de líder de la competencia por cuarta jornada consecutiva y mantuvo su ventaja de 46 segundos sobre el británico Geraint Thomas (Ineos Grenadiers) y de 47 segundos respecto del colombiano Daniel Felipe Martínez (Bora Hansgrohe).
El italiano mejor ubicado en la general sigue siendo Lorenzo Fortunato, de Astana, quien marcha sexto a un minuto y siete segundos de la cima.
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