(ANSA) - PARIS, 06 GEN - El presidente de Francia, Emmanuel
Macron, aseguró hoy que la celebración del controvertido acuerdo
comercial entre la Unión Europea y los países sudamericanos del
Mercosur "no es un trato cerrado", al tiempo que identificó a
Irán como el principal desafío geopolítico y de seguridad.
"Esto no ha terminado, seguiremos defendiendo
vigorosamente la coherencia de nuestros compromisos", indicó el
mandatario sobre los acuerdos con el bloque sudamericano que
lideran Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay y que ha desatado
gran rechazo en el sector agro-ganadero de su país y otras
naciones de la Unión Europea.
En diciembre pasado en Montevideo, después de 25 años de
negociaciones, la Unión Europea y el Mercosur sellaron un texto
de acuerdo de libre comercio, que fue anunciado por la
presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Es "una victoria para Europa. Es un día verdaderamente
histórico (...) Estamos reforzando nuestra asociación como nunca
antes y al hacerlo estamos enviando un mensaje claro y poderoso
al mundo", afirmó Von der Leyen, quien añadió que esta
iniciativa no constituye solo una necesidad económica, sino
también "una oportunidad política". Pero, el acuerdo necesita la
aprobación de los parlamentos de los países del bloque, un
trámite que promete ser lento y engorroso.
Macron, desde luego, hizo un enfoque también de la
geopolítica mundial. "Irán es el principal desafío
estratégico y de seguridad para Francia, los europeos, toda la
región y más allá", puntualizó en su tradicional mensaje al
cuerpo diplomático del país. "La aceleración de su programa
nuclear nos lleva muy cerca del punto de ruptura", añadió el
jefe del Eliseo.
Los europeos deben proceder "mucho más rápido y con mucha
más intensidad" para reforzar su industria de defensa frente a
las amenazas crecientes", afirmó Macron, en el Elíseo, en su
tradicional encuentro con los embajadores franceses reunidos
para el inicio del año.
"La cuestión - dijo - es saber si los europeos quieren,
durante los próximos 20 años, producir lo necesario para su
seguridad o no". Porque "si dependemos de la base de defensa
industrial y tecnológica estadounidense, entonces tendremos
dilemas crueles y dependencias estratégicas culpables".
Macron también dijo que el presidente electo de Estados
Unidos, Donald Trump, "sabe que tiene un sólido aliado en
Francia". Trump "sabe que en Francia tiene un aliado sólido, un
aliado que no subestima", "que cree en Europa" y es portador de
"una ambición clara" para la relación trasatlántica, insistió el
mandatario.
"De 2016 a 2020, Francia pudo trabajar con el presidente
Trump", añadió en referencia a la primera presidencia del
republicano.
"Si decidimos ser débiles y derrotistas - prosiguió Macron
- hay pocas posibilidades de ser respetados por los Estados
Unidos de América del presidente Trump". "Depende de nosotros
saber cooperar con la elección hecha por el pueblo americano",
enfatizó luego.
Asimismo, Macron advirtió que "no habrá una solución rápida
y fácil en Ucrania", pese a que el presidente electo
estadounidense prometió resolver el problema rápidamente.
"El nuevo presidente americano sabe que Estados Unidos no
tiene ninguna posibilidad de ganar nada si Ucrania pierde",
avisó el presidente francés y añadió que "una capitulación de
Ucrania no sería positiva ni para los europeos ni para los
americanos".
Para Macron, la "credibilidad" de los occidentales
quedaría "demolida" si aceptaran "comprometerse" debido al
"cansancio" del conflicto. Macron continuó diciendo que los
ucranianos deberían "iniciar discusiones realistas sobre
cuestiones territoriales", ya que "solo ellos pueden llevarlas a
cabo" para encontrar una solución al conflicto provocado por la
invasión rusa en 2022.
"Estados Unidos debe ayudarnos a cambiar la naturaleza de
la situación - continuó Macron - y convencer a Rusia para que se
siente a la mesa de negociaciones", mientras que los europeos
tendrán que "construir garantías de seguridad" para Ucrania "que
serán sobre todo su responsabilidad".
Luego lanzó un llamamiento a "mirar sin ingenuidad el
cambio de régimen en Siria" y ha prometido no abandonar a los
combatientes kurdos aliados de Occidente en la lucha contra el
terrorismo. "Francia acompañará la transición en el tiempo
apoyando una Siria soberana, libre y respetuosa de su diversidad
étnica, política y confesional", enfatizó.
Macron prometió que Francia seguirá siendo "leal" a los
"luchadores por la libertad, como los kurdos", que luchan contra
el terrorismo y, en particular, contra el ISIS (Estado
Islámico).
Por otra parte, Macron acusó a Elon Musk de "liderar una
nueva internacional reaccionaria" y de inmiscuirse en elecciones
extranjeras, como en Alemania.
"Hace diez años si nos hubieran dicho que el propietario
de una de las principales redes sociales del mundo apoyaba a una
nueva internacional reaccionaria y que intervino directamente en
elecciones, incluidas las de Alemania, nadie lo habría creído,
afirmó el inquilino del Elíseo, en la conferencia con los
embajadores de principios de año. (ANSA).