(ANSA) - ROMA 2 ENE - Los italianos son pesimistas sobre 2025
y temen, principalmente, al aumento de precios y la inflación.
La clase trabajadora está más preocupada, también por la
violencia, las guerras y el clima.
Para 2025, dos de cada tres italianos no esperan mejoras en
la situación general del país, seis de cada diez temen un
aumento del costo de la vida, con un pesimismo más pronunciado
entre la clase trabajadora.
A su vez, los índices de violencia, las guerras, el cambio
climático y las desigualdades sociales, considerados "los
enemigos del futuro", son motivo de preocupación.
Este es un resumen de lo que se desprende del informe
FragilItalia "Una mirada al futuro", elaborado por Area Studi
Legacoop (un ente que aglutina diversas cooperativas) e Ipsos, a
partir de los resultados de una encuesta realizada a una muestra
representativa de la población.
Más concretamente, el 61% de los italianos, lo que supone
un 80% de la clase trabajadora, no prevé una mejora de la
situación general en Italia, en paralelo con las expectativas
negativas sobre la evolución del escenario económico: 4 sobre 10
(el 42%, que se eleva al 59% en la clase trabajadora) auguran
una fase de recesión.
El tanto, el 34% proyecta estancamiento; 6 de cada 10 (63%,
llegando al 70% en la clase trabajadora) esperan un aumento en
el costo de vida.
Las expectativas sobre algunos aspectos básicos del
contexto general también son negativas: en primer lugar, el 86%
de quienes piensan que los índices de violencia en la sociedad
se confirmarán o incluso empeorarán, seguidos por el 84% que
señala las guerras en curso, por 82% con el cambio climático y
en 81% con las desigualdades sociales.
Las cosas van un poco mejor en la situación familiar,
donde, junto con el fuerte crecimiento de quienes esperan que
haya "altibajos" con altibajos (61% frente al 41% de hace un
año) y la disminución de 10 puntos en quienes esperan un año de
crisis (8%, pero con una cifra que se eleva al 26% en la clase
trabajadora), emergen expectativas positivas sobre la evolución
de las relaciones familiares (83%), el amor, el afecto y las
relaciones con amigos (80%), salud (77%), trabajo (63%). (ANSA).