Por Marcos Romero
(ANSA) - CIUDAD DE MEXICO, 31 DIC - La posibilidad de que el
Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá
(T-MEC), vigente desde 1994, se expanda a otras naciones de
América Latina, por ahora parece inviable entre los expertos en
la materia.
El pasado 17 de diciembre, la presidenta de México, Claudia
Sheinbaum, propuso en una conferencia de prensa con su homólogo
de Colombia, Gustavo Petro, que el acuerdo trilateral "debería
ampliarse en muchos sentidos" hacia países de Centro y Sur de
América.
"Más allá de las afinidades ideológicas entre los gobiernos
progresistas de la región, la integración económica es clave
para fortalecer a Latinoamérica en el escenario global", afirmó
Sheinbaum.
La mandataria recordó que su antecesor y mentor político, el
expresidente Andrés Manuel López Obrador, le manifestó que el
T-MEC no debía "limitarse a los tres países", sino extenderse
hacia el sur de América Latina" y que esta ampliación
transformaría al continente en una "potencia económica",
superando incluso a otras regiones del mundo.
Sin embargo, Larry Rubin, presidente de la American Society,
considera que por ahora Estados Unidos no tiene interés en
ampliar con nuevos socios de la región el tratado.
"Sí hay lugar en el T-MEC para expandirlo a otras naciones,
pero la realidad es que la próxima revisión en el 2006 estará
muy centrada en otros temas", como "mantener vigente el
acuerdo", afirmó, al señalar que no cree que Washington o Canadá
tengan "apetito" por "buscar acrecentarlo".
"Es una buena iniciativa buscar mercados alternos" tanto
para Estados Unidos como para Canadá y México pero "difícilmente
ahora podemos medir si habrá o no esa" intención", sino hasta
fines de 2025 cuando legisladores de Estados Unidos puedan
analizar si es viable o no una potencial expansión del acuerdo
hacia el sur.
Líderes de empresarios estadounidenses como Eric Farnsworth,
vicepresidente de la Americas Society, no lo ven de mal modo,
pues estiman que ampliar el tratado de libre comercio
México-Estados Unidos y Canadá (T-MEC) a otros países,
estimularía la inversión en el área.
Sin embargo, en el otro extremo de las opiniones, líderes
conservadores canadienses han planteado poner fin al T-MEC tal
como está actualmente, excluyendo a México, y convertirlo en un
acuerdo bilateral con Estados Unidos.
A mediados del 2025, los tres países tienen planeado
realizar una nueva revisión del tratado en medio de amenazas del
futuro presidente de Estados Unidos Donald Trump, que asume su
encargo el 20 de enero, de imponer aranceles del 25% a todas las
importaciones mexicanas, lo que anularía las ventajas del
acuerdo trilateral, según los especialistas.
Estados Unidos mantiene 15 tratados de libre comercio, tanto
bilaterales como multilaterales, entre ellos uno con Colombia,
que es aún limitado.
Sheinbaum dijo que el tratado fue "un motor clave en la
economía de la región" pero dijo que "aún hay un gran potencial
sin explotar" para una mayor integración regional.
En marzo pasado, congresistas estadunidenses presentaron un
proyecto de ley que facilita la inversión y la adhesión de
países latinoamericanos al T-MEC para "contrarrestar la
influencia de China y disminuir la migración" y dijeron que su
país no presta "la suficiente atención a América Latina".
(ANSA).