(ANSA) - CARACAS, 22 NOV - El ritmo de devaluaciones diarias
y semanales en Venezuela sigue imparable y al cierre de esta
tercera semana de noviembre el tipo de cambio oficial medido por
el Banco Central sube 8,4% respecto al cierre de octubre, para
ubicarse en 46,32 bolívares por dólar.
Pero el dólar en el mercado paralelo (no oficial), que rige
la mayoría de los precios en el comercio y en el mercado laboral
informal, la devaluación es más vertiginosa. En la mañana de
este viernes, el billete estadounidense se cotizaba en un
promedio de 56,78 bolívares, con una devaluación de casi 11%
respecto al 1 de noviembre.
La brecha entre los dos tipos de cambio sigue por encima de
20%, lo que según analistas alimenta enormes distorsiones en los
precios de referencia, en una economía dependiente de
importaciones.
"El precio del dólar imparable y el bolívar cayendo,
arrastrando a los salarios y las pensiones. El bolívar se
devalúa porque no hay confianza y el BCV no tiene reservas en
divisas para defender al tipo de cambio", señala el economista
opositor José Guerra, ex gerente del BCV.
"En el fondo hay que encontrar una solución a la crisis
política que es la esencia de la crisis económica", añade.
Mientras, el gobierno de Nicolás Maduro intenta atraer
inversionistas extranjeros que le ayuden a reflotar la economía,
e insiste en que ofrece una moneda estable y seguridad jurídica.
Analistas señalan que con el regreso de Donald Trump a la
Casa Banca se prevén más sanciones contra Maduro, lo que
afectaría las exportaciones petroleras y la oferta de dólares en
el mercado.
Las reservas internacionales totales del Banco Central
cerraron el 15 de noviembre en apenas 10.223 millones. Pero,
según economistas, la mitad de esa cifra no está disponible,
porque son Derechos Especiales de Giro, la moneda contable del
FMI.
Esos fondos están retenidos porque el Fondo tampoco
reconoce al gobierno de Nicolás Maduro y desde hace más de 20
años no hay relaciones directas entre las partes. Además,
Venezuela mantiene una deuda externa en mora que supera los
165.000 millones de dólares, imposible de negociar si no hay en
Caracas gobierno reconocido. (ANSA).