(ANSA) - PARIS, 26 LUG - Un centenar de aficionados recibió
hoy a la delegación olímpica palestina, que participará en los
Juegos de París, en el aeropuerto parisino de Roissy-Charles de
Gaulle, al grito de "Palestina Libre".
"De París a Gaza, resistencia, resistencia", entonaban los
manifestantes que se congregaron desde la primera hora del día
en la terminal aérea para darle la bienvenida a la acotada
delegación palestina, conformada por ocho deportistas, que
arribó procedente de Ramala.
Los atletas, entrenadores y dirigentes que la integran tienen
como principal objetivo no la posibilidad de pelear por
medallas, sino denunciar el "tratamiento inhumano" que sufren
sus compatriotas desde que se inició la ofensiva del ejército
israelí en Gaza el 7 de octubre tras el ataque perpetrado por
Hamas.
"Hoy, Palestina le envía un mensaje al mundo y apunta a la
necesidad de poner fin al genocidio contra nuestro pueblo en
Gaza, terminar con la ocupación que lleva adelante el régimen de
apartheid en los territorios ocupados, detener el terrorismo de
los colonos en Cisjordania y poner sobre el tapete el 'status
quo' en Jerusalén", afirmó Hala Abou Hassir, representante de la
Autoridad Nacional Palestina en Francia.
Según el último balance aportado por el Ministerio de Salud de
Hamas, son casi 40 mil los civiles masacrados en Gaza por el
ejército israelí desde que se inició la ofensiva, la mayoría de
los cuales mujeres y niños.
El presidente del Comité Olímpico Palestino, que también preside
la federación de fútbol de ese país, Jibril Rajoub, señaló que
"el Comité Olímpico Israelí perdió el derecho moral, deportivo,
humanitario y legal de participar" en los Juegos.
"Fue al avalar y en algunos casos al participar del genocidio y
el operativo de limpieza étnica que se lleva a cabo en Gaza",
agregó al reiterar el pedido al Comité Olímpico Internacional
(COI) para que impida la presencia de los atletas israelíes en
los Juegos de París, donde la selección de fútbol de ese país
debutó el miércoles frente a Mali.
Un reclamo que cayó en saco roto porque el COI no adoptó la
misma medida que sí adoptó en su momento con los atletas rusos
(y bielorrusos) como castigo por la guerra que ese país libra
desde febrero de 2022 con Ucrania y los obliga a participar sólo
como "neutrales" a condición de que no hayan respaldado
públicamente el conflicto o integren equipos de las fuerzas
armadas nacionales.
Consultado sobre qué podría ocurrir si un atleta palestino
debiera enfrentar a un israelí en alguna competencia, Rajoub
destacó que "desde el punto de vista psicológico, humanitario y
moral sería imposible".
"Nosotros somos las víctimas y ellos los criminales", agregó
Rajoub, histórico dirigente de Fatah (también conocido como
Al-Fatah), el partido del presidente de la Autoridad Nacional
Palestina, ;; Mahmoud Abbas, al recordar que "desde el 7 de
octubre fallecieron 300 atletas y trabajadores del deporte".
"No vinimos a París por medallas, sino para involucrar a la
mayor cantidad de personas posibles en la causa palestina y si
lograr una medalla me lo permite, entonces sí estaría
interesado, porque no me importa el dinero", afirmó el nadador
Yazan Al Bawwab.
"Yo tengo la oportunidad de ser escuchado como palestino, pero
decenas de miles de compatriotas son tratadas como números de
forma deshumanizada", agregó Al Bawwab, quien participó también
en los Juegos Olímpicos de Tokio celebrados en 2021.
"No sentimos presión alguna, la presión la soportan a diario los
palestinos en Palestina", completó al aludir a una situación que
impacta de lleno en los Juegos de París, donde Israel denunció
hoy un complot respaldado por Irán para atacar a su delegación.
El Papa Francisco aludió hoy en su mensaje a la mentada "tregua
olímpica", convocando a respetarla en momentos en los que
-destacó- "la paz en el mundo se ve seriamente amenazada".
Fabrice D'Almeida, profesor de historia contemporánea del
"Institut fran‡ais" y un reconocido divulgador científico
televisivo, afirmó, sin embargo, que "no es cierto que la tregua
olímpica en la antigedad haya frenado una guerra".
"Lo que se acordaba era simplemente un salvoconducto para los
atletas, cualquiera fuese su procedencia, para participar en los
Juegos", explicó al aclarar: "Podemos decir que en París la
tregua entendida en el sentido helénico se aplica, por ejemplo,
a los atletas israelíes, de los cuales muchos, incluidos los
iraníes, piden su exclusión y que, en cambio, compiten
regularmente".
"En realidad -afirma D'Almeida- en cuanto a la tregua olímpica
(que, insisto, hay aquí: un atleta ruso, quizás sin bandera, se
encuentra con un ucraniano...), Macron la entiende de una manera
un tanto personal porque pretende que las cuestiones políticas
internas no se aborden en Francia durante este período".
Según el profesor, Macron podría llegar a utilizar el éxito de
los Juegos en su beneficio como "arma diplomática en un momento
de debilidad política" porque -dijo- "hoy no se encuentra en la
misma situación que hace cinco años, cuando tenía mayoría en la
Cámara de Diputados y un primer ministro". (ANSA).