(ANSA) - PARIS, 17 LUG - La alcaldesa de París, Anne Hidalgo,
y el presidente del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos
2024, Tony Estanguet, se zambulleron en las aguas del río Sena a
nueve días de la ceremonia inaugural de la cita.
Hidalgo cumplió su promesa acompañada por Estanguet y por el
prefecto de la región Ile-de-France, Marc Guillaume, a la altura
del Bras Marie, entre el distrito Saint-Paul y el Ile
Saint-Louis.
Los tres funcionarios buscaron demostrar de esta manera que las
aguas del río Sena están en condiciones de albergar las pruebas
de natación de fondo y de triatlón además de la ceremonia de
apertura de París 2024.
La ministra de Deportes francesa, Amélie Oudéa-Castéra, y el
nadador paralímpico francés Alexis Hanquinquant se zambulleron
el pasado sábado 13 en las aguas del río Sena a metros del
Puente de los Inválidos, cercano al Puente Alejandro III.
El baño fue prohibido en el río Sena debido a la contaminación
ya en 1923, pero Hidalgo prometió en 2016 que se zambulliría en
2024.
Desde 2016 el Estado francés invirtió 1.400 millones de euros
para "limpiar el Sena".
"Es un día soñado", afirmó Hidalgo con una sonrisa antes de
ingresar al río Sena con gafas de natación de color negra y un
traje de sumersión corto.
"Promesa cumplida. Los Juegos fueron un acelerador y dejamos una
gran herencia a la ciudad", enfatizó luego Hidalgo tras salir
del río, cuyas aguas se encontraban con una temperatura de 20
grados.
"Detrás hay mucho trabajo, lo logramos", añadió la alcaldesa en
diálogo con periodistas, algunos de los cuales decidieron a
continuación zambullirse también en el Sena.
A su vez, Estanguet destacó una "sensación formidable" tras
haber enviado "un importante mensaje a todos los atletas" que
competirán en París 2024.
"Estamos, pueden bañarse en el Sena y efectivamente las pruebas
de triatlón y natción de fondo podrán disputarse aquí", remarcó
Estanguet, quien calificó como "emblemático" su baño con Hidalgo
y Guillaume como símbolo de "la ambición de ofrecer Juegos
responsables y útiles que dejarán un legado".
Por su parte, Oudéa-Castera aseguró que se encuentra en perfecto
estado de salud cuatro días después de haberse sumergido en las
aguas del río Sena para desestimar las sospechas de su
contaminación.
"Estoy muy bien, en plena forma, estamos listos, pueden bañarse
en el Sena. No tengo efectos secundarios", declaró Oudéa-Castera
al diario L'Union. (ANSA).