Por Oscar Escamilla BOGOTA, 13 (ANSA)- El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, descartó hoy adelantar algún tipo de operativo militar contra el jefe máximo de las FARC, Rodrigo Londoño 'Timochenko', debido al avance de los diálogos de paz con esa organización rebelde.
    Consultado si ordenaría un ataque contra el jefe rebelde, en caso de ser ubicado, Santos respondió: "yo creo que a estas alturas no".
    En abril del año pasado, el jefe de Estado dijo por primera vez que se "lo pensaría dos veces" antes de lanzar un ataque contra el campamento o el lugar donde se encontrara el jefe guerrillero, tras advertir en aquel momento sobre los avances de los diálogos de paz.
    El fin de semana anterior, Santos le dijo a la revista Semana que estaría dispuesto a reunirse con Londoño, de ser necesario, y admitió que el jefe negociador del gobierno en La Habana, Humberto de la Calle Lombana, sostuvo dos encuentro con el jefe guerrillero en la capital cubana.
    El presidente, en entrevista con RCN Radio, reiteró este jueves que estaría dispuesto a tener un encuentro con Londoño, para acelerar el proceso de paz o para sellarlo.
    "Yo no tengo ningún problema en reunirme con Timochenko, bien sea para acelerar, bien sea para rematar. Lo que a mí me interesa es finiquitar este conflicto lo más pronto posible y por eso estoy dispuesto reunirme en cualquier circunstancia", reiteró Santos.
    El mandatario negó saber en qué lugar estaría Londoño, al tiempo que descartó que se encuentre en La Habana.
    "No se donde esté en estos momentos", dijo Santos y agregó, "en Cuba no está en este momento".
    Contra Londoño se estiman que hay unas cien órdenes de arresto, que en estos momentos se encuentran suspendidas, para habilitar su eventual presencia en las conversaciones de paz en la capital cubana.
    Las declaraciones del jefe de Estado surgen tras la polémica que despertó una afirmación suya de ayer en la que aseguró que era posible convocar un "congresito", con integrantes abordo de las propias Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), para ratificar los acuerdos a que se lleguen con esa organización en La Habana.
    De inmediato, varios senadores, incluso de la coalición de gobierno, descartaron tal posibilidad, al recordar que no es posible designar un órgano que le dé viabilidad a los acuerdos cuando eso es posible hacerse desde el Congreso.
    La molestia llegó a tal grado, que hoy el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, debió aclarar que lo dicho por el jefe de Estado no significa revocar el actual Congreso, como se hizo en 1991 cuando se reformó la Constitución Nacional, sino que sería de una comisión especial para que dentro del mismo Senado se estudie lo acordado en La Habana.
    El mismo Santos salió hoy al paso de sus afirmaciones, en un afán por bajarle la temperatura a la discusión y debido al rechazo que generó su propuesta.
    "Cualquier cosa que yo diga puede ser utilizada en mi contra", aseguró este jueves el presidente, quien sostuvo que su propuesta es una de varias posibles fórmulas para ratificar lo acordado con los rebeldes.
    Explicó que se trataría de "una especie de comisión especial legislativa" integrada por congresistas y hasta por tres guerrilleros, para estudiar la viabilidad de lo pactado y llegado el caso sugerir cambios constitucionales.
    "Aquí nadie está haciendo nada para sustituir el Congreso, es el propio Congreso el que eventualmente tendría que decidir cómo se realiza el desarrollo de lo que se acuerde en La Habana, que requiera una reforma constitucional", explicó Santos.
    El gobierno colombiano y las FARC adelanta desde hace tres años conversaciones en Cuba, para poner fin a más de 50 años de conflicto armado interno, mediante al discusión de cinco puntos, tres de los cuales ya fueron acordados.
    YK7/ACZ
13/08/2015 18:59