SANTIAGO DE CHILE, 29 (ANSA) - El condenado general retirado
Manuel Contreras, exjefe máximo de la Dirección de Inteligencia
Nacional (DINA), el temido organismo de seguridad de la
dictadura que sembró terror en Chile tras el golpe
militar de 1973, se encuentra hospitalizado en
grave estado. Fuentes de la radio Bío Bío señalaron que el militar, de
86 años, está internado en el Hospital Militar y se encuentra
obnubilado, sufre de disnea, hipertensión sistólica y compromiso
de conciencia fluctuante, por lo que se le ha suministrado
morfina para paliar los dolores. Contreras padece cáncer de colon, diabetes, hipertensión, y
es dializado tres veces a la semana por los problemas renales
que registra, a lo que se suman las consecuencias de una
trombosis. El "Mamo", quien cumple condena en el penal exclusivo para
militares de Punta Peuco en Colina, sufrió el 4 de octubre de
2014 una descompensación mientras era sometido a diálisis y
desde esa fecha estuvo entre el Hospital del Ejército y la
cárcel, donde cumple más de 500 años de presidio por
genocidio, homicidio, desapariciones, torturas y
crímenes de lesa humanidad. Hasta la fecha, el militar tiene 58 sentencias definitivas
que suman 516 años de cárcel, a los que se agregan siete años
más que cumplió a partir de 1995 por el crimen en Washington
del excanciller y ministro de Defensa Orlando Letelier y su
secretaria estadounidense, Ronni Moffitt, asesinados
el 21 de septiembre de 1976. El impacto de este atentado provocó que la dictadura
disolviera en agosto de 1977 la DINA, reemplazada por la Central
Nacional de Informaciones. Contreras fue pasado a retiro del
Ejército.
Entre los más de 3.000 muertos y desaparecidos que
acreditó en 1991 el Informe Rettig, en su mayoría aparece como
responsable la plana mayor de la DINA que dirigía Contreras con
mano férrea.
La última actuación pública del "Mamo" fue en agosto
de 2013, con motivo de los 40 años del golpe militar, cuando fue
entrevistado por la televisión en el entonces penal Cordillera
donde dijo que él no estaba encarcelado y que sus custodios
estaban para pasarle el bastón. Sus dichos provocaron que el entonces presidente Sebastián
Piñera ordenara el cierre del establecimiento donde 11 militares
condenados por graves violaciones a los derechos humanos
mantenían un régimen carcelario distinto con visitas diarias
de sus familiares, celdas individuales, cancha de tenis y
piscina, entre otras comodidades. En esa oportunidad, como en las anteriores, Contreras
negó la existencia de los detenidos-desaparecidos y que la DINA
torturara, dijo que no se arrepentía de nada y rechazó que
tuviera que pedir perdón. El agravamiento de Contreras se produce en momentos en que
exconscriptos rompen el silencio impuesto en el Ejército sobre
dos jóvenes quemados por una patrulla en 1986. La presidenta
Michelle Bachelet llamó a seguir el ejemplo de los exreclutas y
entregar información sobre el destino de los desaparecidos.
(ANSA).
MBA/MRZ
29/07/2015 20:08
|