BRASILIA, 24 (ANSA) - El ministro de Hacienda de Brasil,
Joaquim Levy, reconoció que la crisis económica es seria y que,
pese a que debió revisar la meta de superávit, consideró que el
escenario mejorará en los próximos meses mientras continúa el
plan de ajuste. "Nosotros paramos de empeorar, desde el punto de vista
estructural, la situación está comenzando a mejorar" declaró el
funcionario en entrevista divulgada por el canal GloboNews en la
noche de ayer. "Ahora todo parece ser muy complicado, pero nosotros sabemos
que vamos a salir adelante", prometió Levy, considerado el
ministro más influyente del gabinete de la presidenta
Dilma Rousseff. Sin embargo en medios financieros Levy, exdirectivo del
Banco Bradesco, es visto como un funcionario declinante luego de
la derrota política sufrida esta semana cuando accedió a reducir
el déficit primario del 1,1 por ciento al 0,15 por ciento.
Consultado sobre esa concesión a sectores del gabinete que
representan una propuesta económica más desarrollista Levy
respondió renovando su compromiso con el ajuste. "Nosotros no tiramos la toalla, por el contrario, vamos a
continuar con mucho vigor con nuestra política" aseguró Joaquim
Levy. Y añadió que la reducción del superávit fue en función de una
evaluación "realista" de la coyuntura económica signada por la
caída de la recaudación y el parate de la actividad económica
que puede caer el 1,7 por ciento este año. "Tenemos una meta muy clara que es la de reducir las
incertidumbres para que las personas puedan hacer planes para el
futuro y puedan tomar decisiones con más seguridad, en estos
momentos lo que queremos es seguridad". "Levy está muy desacreditado, prometió algo que no cumplió,
eso es de lo que todo el mundo habla acá en Brasilia" dijo hoy
Fernando Rodrigues, columnista del sitio UOL del grupo Folha de
San Pablo. Por su parte Levy estima que Brasil no perderá el grado de
inversor concedido por las agencias de riesgo y que logrará
reducir la inflación, proyectada en más del 9 por ciento para
este año, a pesar de lo que opinan varios observadores. "Ahora es casi seguro que las agencias de rating bajen la
clasificación y esto pone en riesgo el grado de inversión, que
encarecería mucho el precio de los créditos pedidos al exterior"
pronosticó Alexandre Schwartsman, ex director del Banco Central.
(ANSA).
DCP/MRZ
24/07/2015 20:36
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