BUENOS AIRES, 19 (ANSA) - Adrián Napolitano (alias "Panadero"), el barra de Boca Juniors que agredió con gas tóxico a los jugadores de River Plate, afirmó que se le "fue de las manos" la situación y ahora "el mundo" se le "viene encima". "No pensé que esto iba a llegar a lo que llegó. Voy hace 25 años a la cancha, me gusta la fiesta en la tribuna pero esto se me fue de las manos. Soy un laburante (trabajador), me levanto todos los días a las 4 de la mañana para laburar", dijo Napolitano.
    "Nunca conocí una comisaría... Estoy asustado, no pensé que había cámaras. No sé qué hacer, cómo reaccionar... La verdad es que no tuve intención de hacer lo que hice. Para mí se viene el mundo encima", agregó el fanático, en un mensaje que grabó en el teléfono del periodista Gustavo Grabia, del diario Olé. Por su parte, el presidente de Boca, Daniel Angelici, apuntó hoy a dirigentes rivales tras informarse que Napolitano y otro de los once barras implicados en la agresión contra River formaron parte de agrupaciones opositoras en la política del club.
    "Soy consciente de que me quieren voltear como presidente", afirmó Angelici, quien busca la reelección en diciembre, y pertenece además al PRO de Mauricio Macri, expresidente de Boca, alcalde de Buenos Aires y precandidato opositor para las elecciones presidenciales en Argentina, en octubre próximo.
    "Todos saben" que Napolitano pertenece a la Agrupación Nuevo Boca del dirigente Roberto Digón, dijo hoy Angelici, tras el escándalo del jueves pasado en la Bombonera que provocó la eliminación de Boca de la Copa Libertadores.
    Digón aclaró que Napolitano dejó su agrupación hace siete años, pero el diario Olé afirma hoy que "jamás dejó de tener relación con la misma", en tanto Gustavo Florentín, otro de los barras implicados, formó parte de la lista opositora Agrupación Boquense de 2011, de los dirigentes Jorge Ameal y José Beraldi.
    Napolitano y Florentín son dos de los once barras denunciados por Boca por el ataque con un gas tóxico a jugadores de River que iban por la manga para iniciar el segundo tiempo del partido que iba 0-0 por un boleto a cuartos de final de la Libertadores.
    "Ninguno (de los dirigentes opositores) me llamó ni llamó al club pero cuando se empezaron a conocer los nombres de los autores de esto sabía que ellos se iban a empezar a desligar aunque todos saben donde están estos delincuentes que se dicen hinchas de Boca", dijo hoy Angelici. Daniel Pablosky, fiscal de la Unidad Especial de Delitos Deportivos, quien revisó las grabaciones de TV junto a la fiscal de La Boca Susana Calleja, afirmó que Napolitano abandonó el estadio disfrazado, mientras "una persona" le indicaba cómo debía hacerlo.
    Napolitano, dueño de una panadería, es un barra de una facción supuestamente enfrentada con la barra oficial que lideran Rafael Di Zeo y Mauro Martín, que sí tienen vínculos y reciben prebendas del propio club.
    La agresión respondería más a una puja interna de la barra que a una disputa política, aunque ambos factores pueden tener que ver con el hecho, afirman hoy especialistas locales, tras uno de los incidentes más graves que recuerde el historial de violencia en las canchas argentinas. La sanción máxima que podría corresponderles es de 16 meses, es decir, sin prisión efectiva, en tanto Boca podría expulsarlos de por vida del club, que vio derrumbar su sueño de reconquistar la Libertadores, para el cual había reforzado el plantel con una inversión de casi diez millones de dólares. EFM/MRZ
19/05/2015 19:45