En una aldea cercana a la ciudad de Huaihua, situada a unos 1.500 kilómetros al suroeste de Pekín, las lluvias torrenciales provocaron un deslizamiento de tierra, informó la televisión estatal CCTV: cuatro casas se derrumbaron y cinco personas perdieron la vida, indicó la televisión, añadiendo que se está realizando la búsqueda de tres personas desaparecidas.
Según los científicos, China se ha enfrentado a condiciones climáticas extremas y temperaturas localmente inusuales en los últimos meses, exacerbadas por el cambio climático. Hoy estaban en vigor varias alertas rojas debido a las lluvias torrenciales, especialmente en Hebei (centro), provincia con la capital, Wuhan, pero también en Anhui (este).
Las fuertes lluvias de los últimos días han provocado inundaciones, especialmente en la provincia sureña de Guangdong, símbolo del poder manufacturero de China. Al menos 38 personas han perdido la vida esta semana, según un informe oficial publicado el viernes.
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