(ANSA) BOLONIA - El número de personas evacuadas a causa de las inundaciones en Emilia-Romaña, rica región del centro-norte de Italia, se elevó a más de 15.000, mientras las víctimas mortales son al menos 14.
Del total de evacuados, al menos 8.000 encontraron alojamiento en hoteles o estructuras establecidas por los gobiernos de las ciudades.
Por la tragedia, además, más de 10.000 personas están sin hogar y alrededor de 27.000 residentes siguen sin electricidad.
En ese contexto las previsiones a corto plazo no muestran signos de mejora, pues para mañana se esperan lluvias generalizadas en la región y se confirmó la alerta roja en la zona de Bolonia a Rímini.
El presidente de Emilia-Romaña, Stefano Bonaccini, y los interlocutores sociales de la región, se reunirán con la premier italiana, Giorgia Meloni, y los ministros competentes.
Al respecto, el ministro de Asuntos Europeos, PNRR y Políticas de Cohesión, Raffaele Fitto, aseguró que "la ayuda para indemnizar a Emilia-Romaña por los daños está lista pero los fondos del PNRR no se utilizarán".
Según Bonaccini, los daños causados por las lluvias y las inundaciones ascienden a "algunos miles de millones de euros".
Meloni convocó una reunión para el próximo martes, cuando se debe declarar el estado de calamidad en Emilia-Romaña.
Los expertos culpan a la crisis climática por la tragedia en la región, donde algunas provincias registraron la mitad de las precipitaciones previstas para todo el año en apenas 36 horas.
Además, todos los ríos de Emilia-Romaña se desbordaron debido a las tormentas.
Hoy, cerca de 3.000 hombres -2.856 entre bomberos, policías, Cruz Roja y personal y técnicos de infraestructuras viarias y ferroviarias, y de empresas de distribución de gas, electricidad y telefonía- y 1.125 voluntarios de Protección Civil trabajaban en las zonas afectadas de la región a raíz del drama de la inundación.
Más de 500 carreteras fueron cerradas en Emilia Romaña, mientras varios pueblos seguían aislados precisamente por la dificultad de los medios de los rescatistas para llegar a las zonas afectadas.
Tanto ha sido así que Viabilità Italia, la mesa de coordinación activa en la Policía de Tránsito, aconsejó a los automovilistas que no viajen en las provincias de Forlì-Cesena y Ravenna, precisamente para dejar libre circulación a los vehículos involucrados en rescate y recuperación.
Y con el riesgo de deslizamientos de tierra después de las inundaciones, la situación está destinada a seguir siendo crítica durante varios días más.
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