Aprobado, plan de resistencia del ingreso mínimo vital", afirmó al finalizar una marcha de trabajadores chavistas en la caraqueña plaza O'Leary.
Además, dijo que estos beneficios serán indexados a la tasa del dólar mensualmente de manera permanente para que no se deterioren con el cambio del valor del dólar.
"Es un plan de resistencia del ingreso que nos debe llevar más temprano que tarde a la recuperación del salario colectivo, total, pero ahora tenemos que resistir con fuerza", expresó.
Más temprano, en una marcha multitudinaria que no pudo llegar a la sede de la Fiscalía General, trabajadores activos y jubilados de diversos gremios junto a dirigentes sindicales, exigieron a Maduro cumplir con la constitución y decretar un salario digno acorde al costo de la canasta básica alimentaria.
Además, advirtieron que seguirán en las calles luchando por sus derechos salariales y laborales.
El salario mínimo se mantiene desde marzo de 2022, cuando Maduro lo decretó en 130 bolívares al mes, que equivalía en ese entonces a casi 30 dólares a tasa oficial, pero ahora con la devaluación que ha registrado el bolívar, escasamente sobrepasa los 5 dólares al mes.
De acuerdo con el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM) en marzo de este año, se necesitaban 98 salarios mínimos, es decir, unos 510,88 dólares para adquirir la canasta básica familiar.
Venezuela registra una severa crisis económica, acentuada por una dolarización de facto y una alta inflación que anualiza una tasa de 501 % para marzo de este año, de acuerdo con el Observatorio Venezolano de Finanzas, una instancia conformada por economistas adversos al gobierno de Maduro.
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